Mercenario colombiano que combate en Ucrania dijo que no le pagaron completo por los meses que ‘trabajó’ en la guerra

Como en toda guerra, son muchos los horrores que se viven y los exmilitares colombianos han padecido desde xenofobia hasta falta de pago por su trabajo

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Múltiples videos de Militares colombianos
Múltiples videos de Militares colombianos en Ucrania se han convertido en tendencia en redes sociales - crédito Archivo Infobae

Son muchos los exmilitares y mercenarios de distintos países que se han ido a combatir en la guerra entre Ucrania y Rusia bajo las promesas de altas sumas de dinero a cambio de sus servicios, entre esos los colombianos, con alta demanda por su experiencia y buena reputación internacional; sin embargo, en el campo de batalla las condiciones son otras y los combatientes connacionales se han tenido que enfrentar a falta de pago y desprecios por parte de ucranianos y rusos.

Uno de los tantos casos de mercenarios colombianos con malas experiencias en la guerra fue conocido por la revista Semana, que dio a conocer el testimonio de un excombatiente a quien solo le pagaron seis de los diez meses que estuvo en batalla defendiendo los intereses ucranianos.

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Duré allí diez meses, de los cuales solo me pagaron seis. Los otros no fueron retribuidos. Lastimosamente también vi compañeros allí en el campo de batalla que caen, pero no los repatrian, no los regresan, quedan en ese lugar. Entonces las experiencias son muy diferentes a como las cuentan”, dijo el exmilitar colombiano en entrevista con el medio en mención.

En su relato el mercenario, a quien le protegieron su identidad, sostuvo que llegó a la guerra por la referencia de unos conocidos que estaban en el campo de batalla y le pintaron una realidad distinta a la que vivió. Pensando en el futuro de su familia el exmilitar viajó de Bogotá a España, luego se dirigió a Italia, de ahí a Cracovia, luego a Varsovia y desde esa población se movilizó en tren hasta Ucrania, donde se enlistó y fue directo al combate.

Por sus destrezas, el colombiano fue asignado a una tropa como francotirador y, según le contó a Semana, dio de baja a cerca de 35 o 40 militares rusos. Sin embargo, los crímenes de guerra que presenció y las promesas incumplidas lo hicieron culminar su permanencia en Ucrania.

Una de las situaciones que más marcaron al exmilitar fue protagonizada por un compañero de tropa de origen checheno, quien no tenía piedad con sus enemigos.

“Aquí es donde se llega más marcado, porque no se respetaba la vida de ellos (los enemigos rusos). Él (su compañero checheno) los hacía arrodillar, los degollaba, les disparaba en la cabeza y se las destruía delante de todos. Le daba igual”, aseveró el colombiano.

Malos tratos en Ucrania

La situación relatada por el exmilitar se suma a los padeceres que relatan algunos de sus compatriotas que también desistieron de seguir participando en la guerra por malos tratos y el incumplimiento de los compromisos que pactaron previo al ingreso a los combates.

A mediados de julio se viralizó un video de militares colombianos se enfrentaban a soldados rusos alegando tratos inhumanos y hasta xenofobia. “Van 25 soldados colombianos muertos para que este hijo de puta me eche un gas”, dice un mercenario de Colombia en la filmación viral.

Colombianos en Ucrania denuncian malos tratos por parte de militares de este país

El estrés postraumático, el quebranto psicológico y la presión ejercida por sus superiores hicieron que el colombiano se revelara e intentara agredir a un militar ucraniano que, al parecer, lo había menospreciado y señaló que había desacatado una orden directa.

“Me tratan como a un perro y tengo una hijueputa esquirla en el brazo por defender a tu país de mierda; cumplí mis órdenes, formé a la gente, y porque ese hijo de puta perro no formó tres personas me tratan como a un animal”, sostiene el mercenario colombiano.

En contraste con esa situación, otro mercenario connacional en Ucrania defendió su labor en la guerra y dijo que recibía un pago adecuado por exponer su vida. Además, sostuvo que el inconveniente de los otros mercenarios con sus superiores ucranianos se dio por los efectos del alcohol.

“En Colombia cualquiera lo ‘apuñalea’ a usted y lo mata por robarle el celular; si no es la delincuencia común, están las guerrillas con sus ataques, las extorsiones. Acá por lo menos uno tiene claro el enemigo y pelea contra uno solo (...) El problema que hubo es que el soldado quiso pegarle al sargento ucraniano porque estaban bajo el efecto de bebidas alcohólicas y la verdad eso está mal hecho”, dijo el mercenario en diálogo con semana

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