Emiliana Arango logró una histórica victoria que toma relevancia en el tenis colombiano, pues su clasificación a cuartos de final de un torneo del WTA de la categoría 1.000 no se registraba desde hace 19 años, cuando Fabiola Zuluaga clasificó a la tercera ronda del campeonato de la WTA jugado en Berlín, Alemania.
Su siguiente rival será el partido más difícil de los que ha enfrentado hasta ahora en el WTA 1.000 de Guadalajara, pues se medirá a la número 9 del mundo, la griega Maria Sakkari.
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El encuentro en el abierto de Zapopan se jugará el jueves 21 de septiembre a las 8:15 de la noche en el estadio Akron de Tenis, en la ciudad mexicana. Una victoria de Arango la catapultaría al top-100 del ranking WTA.
Sobre la tenista colombiana, la europea aseguró no tener muchos datos; sin embargo, según ella la clave será confiar en su buen momento. Sakkari viene de derrotar a María Camila Osorio, el miércoles 13 de septiembre, en el WTA 500 de San Diego, Estados Unidos:
“Bueno, si está en cuartos de final, seguro que ha estado jugando buen tenis. No la conozco tan bien. No he hablado con mi entrenador al respecto. Eso es algo en lo que empezaré a pensar mañana. Solo confío en mí misma. Confío en mi juego. Mi juego mejora día a día. Tengo experiencia. Tengo la fuerza mental. Simplemente, creo en mí mismo que puedo superar el próximo obstáculo”.
Maria Sakkari es profesional desde el 2011, cuando a los 16 años comenzó a jugar los eventos ITF, en donde ganó siete títulos individuales (tres en Grecia, uno en Suecia, uno en Serbia, uno en Finlandia y uno en Eslovenia) y cinco en la modalidad de dobles. En 2012 dio el salto a su primer torneo WTA en Palermo, Italia, en donde fue eliminada en la ronda de clasificación.
Su primer Grand Slam fue en 2015, con 20 años, en el US Open, donde no superó la primera ronda. Anterior a ello había jugado en dos ocasiones el cuadro clasificatorio del mismo torneo, sin éxito para avanzar al cuadro principal.
En 2016 comenzó a vivir su gran momento, pues fue la primera temporada en donde ingresó al Top-100 del Ranking WTA, finalizando en el puesto 89. Durante el año llegó a cuartos de final en Estambul; alcanzó la segunda ronda de dos Grand Slam, el Abierto de Australia y Wimbledon; el único Grand Slam donde no tuvo participación ese año fue Roland Garros, donde perdió en la fase previa.
El 2017 fue aún mejor, al mejor su ranking hasta la casilla 57, el resultado de fin de año más alto de una jugadora griega desde Daniilidou en 2007. Registró 17 victorias en el cuadro principal, la mejor marca de su carrera; logró la mejor victoria de su carrera y la primera victoria Top-10 de su carrera sobre el Caroline Wozniacki, número 6 del mundo en ese momento.
Por último, para destacar de aquel año fue su nivel en los torneos más importantes del circuito, avanzando al tercer lugar por primera vez en tres ocasiones diferentes: Abierto de Australia donde perdió contra Lucic-Baroni, Wimbledon donde cayó ante Konta y el Abierto de Estados Unidos. En 2018 pisó por primera vez una final del circuito WTA; en San José, Estados Unidos, donde cayó ante Mihaela Buzărnescu por 6-1 y 6-0.
Además, logró romper su mala relación con Roland Garros avanzando hasta tercera ronda por primera vez en su carrera. Su ranking a final de temporada fue el 42, el mejor hasta ese entonces. Sin embargo, el año más especial de Sakkari fue el 2019, cuando obtuvo su único título WTA. Fue el 4 de mayo del 2019 cuando se impuso a la británica Johanna Konta en tres sets del WTA 250 de Rabat con parciales 2-6, 6-4 y 6-1.
Desde el 2021, Sakkari se mantiene en el Top-10 de la WTA luego de llegar a la tercera casilla, sinónimo de un rendimiento constante en la máxima categoría y ser protagonista en los torneos más importantes del circuito.