Pasajeros de un bus del Sitp se enfrentaron a los ladrones y evitaron un atraco masivo

Cansados de la delincuencia, se negaron a entregar sus objetos personales y, además, retuvieron a los ladrones

Como resultado dos personas fueron capturadas y otras tres, heridas - crédito archivo Infobae

Un nuevo caso de justicia por mano propia se registró la noche del martes 19 de septiembre, cuando varios pasajeros de un bus del Sitp decidieron enfrentarse a tres ladrones para evitar un atraco masivo en el sector de Meissen, Ciudad Bolívar.

Según dio a conocer la sección del Ojo de la noche, la disputa habría ocurrido luego de que, con cuchillo en mano, los delincuentes empezaran a pasar puesto por puesto recogiendo los objetos de valor de quienes iban a bordo.

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Lo que, en un principio, parecía otro atraco masivo en el que los agresores quedarían impunes y los pasajeros sin un centavo en el bolsillo, pronto, se convirtió en un enfrentamiento del que participaron al menos 7 personas.

Hartos de ser víctima de la delincuencia los pasajeros no solo se negaron a entregar sus objetos personales, sino también, golpearon y retuvieron a dos de los criminales, quienes, en medio de la trifulca habrían causado cortaduras en las manos a al menos tres personas.

La acción rápida de pasajeros y policías permitió la captura de ambos delincuentes y su trasladado a la URI de Tunjuelito, mientras , los afectados fueron llevados de urgencia a un centro médico cercano, en donde se recuperan de manera satisfactoria.

Los buses intermunicipales también están en la mira: así quedó registrado en video

El incidente en Meissen ocurre a unas cuantas semanas del último atraco masivo registrado a un bus de servicio público, registrado la noche del sábado 26 de agosto, en un vehículo intermunicipal, que cubría la ruta Bogotá - Facatativá.

Recorriendo las calles del barrio Chicó, se logra apreciar en las grabaciones de seguridad, como dos sujetos –que pagaron su pasaje y estuvieron sentados en la parte trasera del bus durante algunos minutos– se levantan y cubren la salida.

Mientras uno de ellos amenaza al conductor, frente a la única puerta de acceso, el otro pasa puesto por puesto recogiendo elulares, tulas, maletas y dinero en efectivo.

Los pasajeros del frente tardaron en darse cuenta y los de atrás intentaron levantarse y salir del vehículo, pero, para ambos grupos, ya era demasiado tarde.

Amedrantados con armas de fuego, se vieron obligados a entregarlo todo. Incluso, el conductor que, para salvar su vida y no poner en riesgo a las personas a bordo entregó el producido del día.

Pasajeros y conducto fueron víctimas de ambos delincuentes

Justicia por mano propia: un arma de doble filo

Las demoras en los procesos judiciales y la falta de confianza en las autoridades han orillado a algunos ciudadanos a tomar justicia por mano propia, haciendo de este, un fenómeno recurrente en el país. Sin embargo, no deja de ser problemático, ni reduce los índices de criminalidad. Por el contrario, provoca una escalada de violencia e, incluso, la apertura de investigaciones en contra de quienes, en un principio, eran las víctimas.

El abogado penalista Ricardo Burgos, fue enfático en el tema, durante una entrevista concedida al matutino de Arriba Bogotá: “Lo que permite la ley colombiana es capturar a la persona que presuntamente cometió un delito y llevarla ante las autoridades competentes. Nada de golpearlos hasta casi matarlos o quemar los vehículos en los cuales están transitando”.

“Aunque hacer un seguimiento a las cifras de linchamientos puede resultar complicado porque, según, ‘la policía rara vez hace un registro sistemático de estos hechos’, algunas evidencias nos permiten ver un aumento de estos casos, tanto en Colombia como en América Latina. Una de las representaciones más comunes, y a la vez más peligrosas de este fenómeno, es el acto del linchamiento, el cual ha llegado a dejar hasta 140 muertes en un año”, precisó el también abogado, Iván Javier Mojica Rozo, sobre esta práctica.