La plenaria que se llevó a cabo en la Cámara de Representantes el martes 19 de septiembre no solo supuso divisiones entre congresistas por la aprobación de la ponencia positiva y por acusaciones de “jugaditas” que dieron lugar a dicha admisión. Durante la sesión, la representante Catherine Juvinao cuestionó el proyecto y, además, la presencia de algunas personas en el debate que, a su juicio, no deberían haber estado en el lugar.
“A mí me impresiona que las formas del Gobierno del Cambio, que supuestamente va a transformar la manera de hacer política, sea meter a cuanto ministro y director de entidad que no tiene nada que ver con el sector salud en la plenaria de la reforma a la salud, pavoneándose por aquí, me pregunto ¿haciendo qué?”, dijo Juvinao en la plenaria.
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La congresista señaló entonces al ministro de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTic), Mauricio Lizcano, y a la consejera Presidencial para las Regiones, Sandra Ortiz. “Yo con el mayor respeto les digo, tengan cuidado, (...) no sea que más de uno se meta en un problema”, sostuvo la congresista.
Los comentarios de la representante a la Cámara no cayeron bien, por lo que la consejera para las Regiones se pronunció en X (antes Twitter). Sostuvo que “es de sentido común” que la discusión de la reforma a la salud involucra a las regiones de Colombia, en donde se debe tener en cuenta las problemáticas del sector y las posibles soluciones que se buscan con la iniciativa, por lo que su presencia en la plenaria estaría justificada.
“El reclamo reiterado de las comunidades en todos los lugares del país que hemos visitado como gobierno tiene que ver con la prestación del servicio de salud, la falta de hospitales, la escasez de medicamentos, la dificultad para acceder a tratamientos y la crisis presupuestal que viven las EPS”, explicó Ortiz en la red social.
Además, cuestionó a la representante a la Cámara sobre las acciones que, según ella, sí deberían generar polémica como, por ejemplo, su ausencia en una discusión que necesariamente afecta a la población de las regiones.
“Entonces, le pregunto, congresista @CathyJuvinao ¿Cómo no voy a estar como consejera Presidencial para las Regiones pendiente de la reforma a la salud? ¿No le parece que una polémica inteligente y justa sería por lo contrario?, ¿por no estar pendiente de los temas que afectan y trascienden en nuestras regiones y quedarme criticando o atacando detrás de un escritorio o una curul?”, cuestionó la consejera.
La congresista María Fernanda Carrascal también le respondió a Juvinao argumentando que, teniendo en cuenta que el proyecto que busca reformar la salud es una iniciativa del Gobierno nacional, “es de sentido común entender” que quienes hacen parte de él asistan a los debates.
La polémica aprobación de la ponencia positiva
Con 93 votos a favor y 43 en contra, la ponencia positiva de la reforma a la salud fue aprobada en la plenaria de la Cámara de Representantes. Esto ocurrió sin que se creara previamente una subcomisión, la cual habían solicitado y acordado los detractores de la iniciativa para revisar los puntos controversiales. Diversos congresistas calificaron esta acción como una “jugadita”.
“Esto es indignante. Después de que el Gobierno y el presidente (de la Cámara) Andrés Calle se comprometieran a crear la subcomisión de reforma a la salud, y sobre cuya promesa hundimos la proposición de archivo de la reforma, quieren ahora someter a la plenaria a aprobar la ponencia sobre la que justamente no hay acuerdo y que generó la necesidad de la subcomisión”, manifestó la representante Juvinao durante su intervención en la plenaria.
“Siendo así, y comprobando, una vez más, que la tal invitación al diálogo nacional es retórica y nada más, anuncio mi voto negativo a la ponencia y retiraré mi apoyo a la reforma a la salud, hasta tanto no se cumpla con la creación de la subcomisión aprobada por esta plenaria hace tres semanas”, agregó la congresista.
No obstante, la subcomisión fue conformada después y se estableció que serán 22 congresistas de diferentes partidos políticos quienes verificarán más de 500 proposiciones del proyecto de reforma. Luego de las respectivas revisiones, crearán una nueva ponencia que sea sometida a debate en el Congreso.