La Defensoría del Pueblo denuncia que no se construyó hogar para migrantes a EE.UU. que llegan al Chocó y cruzan Panamá

El organismo estatal que vela por los Derechos Humanos viene haciendo seguimientos a las acciones del Estado colombiano para garantizar el paso de los viajeros irregulares al país norteamericano

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Más de 320.000 migrantes han
Más de 320.000 migrantes han cruzado de forma irregular la frontera entre Colombia y Panamá. (EFE/Carlos Lemos)

Continua la crisis humanitaria en la frontera entre Colombia y Panamá por cuenta de las oleadas de migrantes que cruzan la inclemente selva del Darién para alcanzar el ‘Sueño Americano’ y llegar a Estados Unidos, por lo que la Defensoría del Pueblo en Colombia ha estado haciendo seguimiento a esta problemática y que el Estado colombiano garantice los Derechos Humanos de estas personas que lo arriesgan todo en esa peligrosa travesía.

Precisamente, el sábado 16 de septiembre funcionarios de esa entidad estatal participaron en la segunda reunión que realizaron de la denominada Sala Situacional Migracional que se realizó en el municipio de Necoclí, en el oriente del departamento de Antioquia, que ha sido de las poblaciones más afectadas por este fenómeno.

“Nuestra Regional #UrabáDarién invitó a la autoridad departamental y municipal a activar planes de contingencia ante situaciones humanitarias complejas. Estas peticiones con énfasis migratorio se hicieron con el fin de prevenir afectaciones, tanto a la población en movilidad humana, como a las comunidades de acogida ante un posible represamiento en #Necoclí y #Turbo, #Antioquia, y en #Acandí, #Chocó (sic)” informaron a través de su cuenta oficial en la red social X.

También señalaron que estaban revisando las acciones a las que se habían comprometido desde hace varios meses en las administraciones locales para proteger a los viajeros irregulares, entre ellos la implementación de un refugio para estas personas que llegan incluso de latitudes tan lejas como China o de países del África Subsahariana, y del que no se tienen avances.

“La #DelegadaMovilidadHumana le solicitó a @GobChoco información sobre la adecuación de una casa para albergar, en caso de emergencia, a población migrante que hace tránsito por el municipio de Bahía Solano. La solicitud fue presentada por la Alcaldía en la Mesa Migratoria Departamental el pasado 14 de julio y a la fecha no se conocen acciones para adecuar e inmueble y garantizar derechos a esta población (sic)”, trinaron.

Panamá pide al G77 mayor coordinación

Entre tanto, el gobierno del país hermano pidió este sábado al Grupo de los 77 y China una mayor “coordinación” para ejecutar “políticas migratorias efectivas y realistas” que garanticen los derechos humanos de los cientos de miles de personas que cruzan la selva del Darién.

La canciller panameña, Janaina Tewaney, pidió a las delegaciones que sus Gobiernos también atiendan “las causas” -como la violencia y el cambio climático- que llevan a la “migración irregular”, “desorganizada” y “no coordinada”.

“El resultado de esta crisis humanitaria es principalmente el sufrimiento humano y no debe ser ignorado (...) Para Panamá, los efectos de esta crisis se ven diario en nuestro Parque Nacional del Darién, fronterizo con Colombia, una densa selva donde encontramos todos los días a migrantes que mueren en su peligrosa travesía”, alertó.

De acuerdo con Tewaney, solo este año Panamá prevé que entre 400.000 y 500.000 personas crucen el tapón en su trayecto hacia EEUU. y que, en lo que va de año, su país ha recibido cuatro veces más migrantes que en un periodo de cinco años. “Por favor, Darién no es una ruta y no lo puede ser”, reiteró.

Panamá anunció a inicios de mes un paquete de medidas para enfrentar la crisis migratoria en el Darién como aumentar las deportaciones y mover los puntos de control a los que llegan los viajeros.

A esta preocupación se sumó Costa Rica cuya defensora de los Habitantes de Costa Rica, Angie Cruickshank, con el defensor del Pueblo de Colombia, Carlos Camargo, hicieron un llamado a los Gobiernos de los dos países para que garanticen los Derechos Humanos y el tránsito seguro y digno de los miles de migrantes.

“Debe ser de atención especial el impacto que viven las comunidades que reciben a estas personas migrantes, para lo cual se hace necesario el apoyo de las diversas instituciones con medidas que permitan generar tranquilidad en un abordaje ordenado y digno de estos flujos migratorios”, señaló concluyendo agosto.

(Con información de EFE)

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