En un sentido y simbólico acto, que se llevó a cabo el miércoles 13 de septiembre, el Parlamento Europeo le rindió un homenaje al escritor colombiano Héctor Abad Faciolince y a su colega ucraniana Victoria Amelina, que el pasado 28 de junio, falleció tras un ataque de las fuerzas militares de Rusia a la ciudad Kramatorsk, en el este de la exrepública soviética.
En ese hecho sobrevivieron de milagro el autor colombiano y Sergio Jaramillo, quien fue Alto Comisionado para la Paz, cuando departían en una pizzería cuando los rusos perpetraron el bombardeo a la población ucraniana que dejó el trágico saldo de 61 personas muertas y 160 heridos.
La presidenta del organismo, Úrsula von der Leyen, señaló que el autor de El olvido que seremos mantendrá viva la memoria de la novelista y de las víctimas que ha dejado la invasión rusa al país de Europa Oriental que inició en marzo de 2022.
El homenaje se realizó durante el hemiciclo del Parlamento Europeo al lado del alto representante de la Unión Europea (UE) para la Política Exterior, Josep Borrell, donde el momento más emotivo se dio cuando Faciolince levantó ante los eurodiputados una foto de la escritora, lo que conllevó a que recibiera el aplauso más largo de la jornada.
“Héctor nunca se imaginó convertirse en el objetivo de los ataques. Después, decía que no sabía por qué él vivió y ella había muerto. Pero ahora él está hablándole al mundo de Victoria, para salvaguardar su memoria y acabar con esta guerra”, dijo Von der Leyen, que se dirigió a Abad para prometerle que Europa “mantendrá viva la memoria de Victoria y de todas las víctimas”, dijo Von der Leyen.
Von der Leyen relató cómo Amelina se había reconocido “en casa” al llegar a Europa huyendo de Ucrania hacia la República Checa tras la invasión rusa para poner a su hijo menor a salvo porque “el hogar es donde confiamos los unos en los otros y los ucranianos sintieron que podían confiar en los europeos”.
Amelina “fue una de las grandes escritoras jóvenes de su generación y una incansable activista por la justicia” y volvió a Ucrania para seguir documentando los crímenes de guerra rusos en su país tras asegurarse de que su hijo estaba a salvo, recordó Von der Leyen.
“Un año después, la mató un misil balístico ruso mientras cenaba con otros colegas escritores. Víctima de un crimen de guerra ruso, uno de los incontables ataques contra civiles inocentes”, lamentó la alemana.
Von der Leyen se refirió a la iniciativa “Aguanta, Ucrania” para contar a los latinoaméricanos sobre los ataques rusos a civiles y de la que forman parte tanto Abad como Jaramillo, ambos ese día en la cena junto a la periodista Catalina Gómez; los tres sobrevivieron prácticamente ilesos.
Faciolince también es un sobreviviente del conflicto colombiano
La obra cumbre del escritor colombiano El olvido que seremos es precisamente un homenaje a su padre, el médico Héctor Abad Gómez quien fue asesinado el 25 de agosto de 1987 en Medellín, al parecer, por grupos antisubversivos de extrema derecha, conocidos como paramilitares, que para esa época estaban exterminando a todos los que consideraban como auxiliadores de las guerrillas colombianas.
El padre de Faciolince se había destacado en Antioquia porque había dedicado su vida a la defensa de los derechos humanos de la población más desfavorecida de ese departamento en el Occidente de Colombia, así como de los líderes estudiantiles y sindicales.
Una de sus obsesiones era la de lograr la salubridad y la cobertura médica universal para proteger a los más pobres, en especial en Medellín. En ese recorrido el médico, que aunque era miembro del Partido Liberal, lo llevó a tener una cercanía con los partidos de izquierda, lo que lo hizo ser víctima de señalamientos por parte de la ultraderecha.
Tras el homicidio de su padre, según relató en su libro, Héctor Abad Faciolince comenzó a esconderse en las casas de sus allegados, porque se conocían de planes para acabar con su vida, lo que lo llevó a que se tuviera que exiliar en Madrid (España) durante varios años.
Su novela fue llevada al cine con el film homónimo que dirigió el director español Fernando Rodríguez Trueba, ganador del Óscar a la mejor película en en habla no inglesa en 1994. La versión cinematográfica de El olvido que seremos obtuvo el premio Goya a Mejor película iberoamericana en 2021.