Al caso por la muerte del joven Dilan Cruz, ocurrida en noviembre de 2019 en medio de protestas en Bogotá, llegó una prueba que podría darle la vuelta al proceso.
La agencia independiente Forensis Architecture (FA) realizó una investigación que contradice tanto la versión del capitán Manuel Cubillos, quien disparó el proyectil que le causó la muerte al manifestante, como el primer análisis forense de la Fiscalía.
Fernando Rodríguez Kekhan, abogado de las víctimas, señaló a Infobae Colombia que el análisis forense de FA equilibra la balanza en favor de las víctimas, de cara al inicio del juicio en el que esperan que sea imputado por homicidio doloso, es decir, que tuvo la intención de causarle daño a Dilan Cruz al momento de disparar.
Desde la muerte del joven han transcurrido casi cuatro años que se han ido, primero, en el debate jurídico para que el caso quedara en manos de la justicia ordinaria y no la penal militar; segundo, después de ese primer logro de la representación de las víctimas, se ha adelantado la recolección de una serie de pruebas, entre ellas, el análisis de FA que fue entregado el pasado 19 de julio a la Fiscalía para ser adjuntado entre el material probatorio.
Cuando se definió que el caso debía seguir en la jurisdicción ordinaria, explicó Rodríguez, todo el material probatorio que alcanzó a recaudar el juzgado de instrucción militar se mantuvo incólume dentro del expediente. Eso significaba que dentro de las pruebas se debía considerar un informe del Centro Estratégico de Valoración Probatoria (Cevap) que indicaba que Cruz había agredido a los miembros del Esmad durante las protestas, con lo que se justificaba el uso de armas “no letales” en su contra, además de que señalaba que Cubillos no tuvo intención de herirlo.
“El homicidio de Dilan estaba siendo tratado como quien maneja un vehículo y atropella a alguien, como un homicidio culposo, porque se justificaba la utilización del arma, se aplicaba la culpa de la víctima por haberse atravesado al disparo, y además utilizaban una serie de argumentos de contexto para deducir que el señor Cubillos no tenía otra alternativa distinta a utilizar la escopeta Mauser, que en efecto usó, y con la cual le quitó la vida, eso es lo que permite concluir ese informe de Cevab”, explicó Rodríguez.
Forensis Architecture llegó a una conclusión completamente distinta. A través del análisis de varias cámaras, tanto de seguridad como de testigos que grabaron con sus celulares los hechos del 23 de noviembre de 2019, los expertos e investigadores realizaron un esquema 3D de todo el comportamiento, tanto de Dilan como de Cubillos.
“Demostramos que lo que estaba ocurriendo realmente no era un escenario apropiado para utilizar ese tipo de armas supuestamente menos letales; demostramos que el señor Cubillos estaba analizando el comportamiento segundos antes de disparar de Dilan y lo tuvo en su mira por unos cuantos segundos antes de que disparara el gatillo y le quitara la vida. Demostramos que tuvo la intención, por lo menos, de herirlo”, señaló el abogado de las víctimas a Infobae.
Con las grabaciones disponibles de siete cámaras distintas, los investigadores establecieron la posición y los movimientos de Dilan. Con el mismo método, cuatro videos y más de 47 fotogramas siguieron los cuatro pasos previos al disparo que dio el capitán Cubillo, establecieron la posición y el seguimiento de la boca de la escopeta que empuñaba, para establecer que el joven fue “seguido por el arma”, luego tomó posición y disparó.
Esto contradice tanto el testimonio de Cubillos como el análisis del Cevap, que indicaban que el capitán del Esmad buscaba ahuyentar a una “turba” de personas que corrían sobre la carrera Quinta con su disparo.
“Sí hubo intencionalidad, porque no de otra manera se le hace un seguimiento a un objetivo con un arma para luego accionarla. O sea, yo no le apunto a algo solamente por ver cómo se va moviendo; no se trata de un telescopio, unos prismas o de unos binoculares, no, esto es un arma que aparentemente es menos letal, pero en la práctica vemos que sí. De manera que al utilizarla asume el riesgo, lo acepta, dispara y en efecto, ya conocemos los resultados”, aseguró el abogado.
Forensis Architecture asegura que el informe forense de la Fiscalía tiene varios errores técnicos que los lleva a conclusiones equivocadas. Por ejemplo, mientras el Cevap sostiene que Dilan atacó a los agentes del Esmad al devolverles las bombas de gas lacrimógeno, la firma académica asegura que estos elementos cayeron a más de 24 metros de los uniformados por lo que no representaban un riesgo para su integridad.
“Es evidente que son inexactos. Pareciera que había cierto afán, cierta necesidad urgente por sacar unas conclusiones y además para esa época este proceso estaba aún en la Justicia Penal Militar. No sabría yo decir con precisión por qué fue (inexacto), pero allí están demostradas esas falencias que científicamente están quedando en evidencia”, asegura Rodríguez Kekhan.
Ambos informes forenses quedarán en el expediente. La representación de la familia Cruz espera que la Fiscalía se base en el de FA para la formulación de acusación en contra del capitán Cubillos, junto con las demás que han logrado recaudar, mientras que la defensa del policía se basará el adelantado por el Cevap para buscar la menor sanción contra su cliente.
Probar la intencionalidad del disparo es clave. Si no se diera ese escenario, el capitán Cubillos podría responder por homicidio culposo, lo que le daría como sanción una multa económica y el proceso pasaría a una demanda civil. En cambio, el homicidio doloso, como esperan las víctimas que se realice la imputación, lo llevaría a la cárcel.
“En este caso consideramos que el señor Cubillos quiso por lo menos herir a Dilan. No sé si lo quería matar, pero lo que sí es cierto es que sí lo quería herir, para eso utilizó la escopeta y resulta que lo impacto en el cráneo”, concluyó el abogado Rodríguez Kekhan.