Jorge Luis Vargas acusó a Gustavo Bolívar de “instrumentalizar” jóvenes para cometer delitos y de ser “cabecilla de la Primera Línea”

Tras los ataques a la iglesia Porciúncula, la residencia de los frailes de esta comunidad, un concesionario y el CAI de Suba La Gaitana en Bogotá, el candidato de Cambio Radical a la Alcaldía de Bogotá, el general en retiro Jorge Luis Vargas, acusó a Gustavo Bolívar (candidato del Pacto Histórico) de estar orquestando dichos enfrentamientos.

“Le exijo al candidato Bolívar que se pronuncie frente a estos hechos: el ataque al CAI de La Gaitana y los hechos sucedidos en la iglesia Porciúncula. Van 48 horas de un silencio sospechoso, de un silencio que lo único que nos causa son dudas. Candidato Bolívar, hoy lo que nos está quedando claro es que usted es el cabecilla de la Primera Línea”, sentenció en un video publicado en la noche del lunes, posición que volvió asumir durante el debate de los candidatos a la Alcaldía de Bogotá realizado por la Universidad de Los Andes.

Este cruce de declaraciones tuvo lugar luego de que Bolívar y Molano se enfrascaran en una discusión sobre el papel de la Primera Línea en los ataques del segundo fin de semana septiembre y la noche del lunes 11 del presente año.

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A pesar de que la pregunta realizada por la periodista Camila Zuluaga era sobre cómo acabar con la movilidad restringida de la que son víctimas las trabajadoras sexuales de la comunidad trans, el candidato Diego Molano decidió encaminarla hacia quiénes estarían detrás de los ataques a estas personas.

Su intervención inició con una petición directa al candidato Bolívar: “Gustavo, famoso por financiar la Primera Línea, le exijo que dejen los ataques y el vandalismo de la ciudad que la tiene bajo acecho los últimos tres días”.

Según Molano, las “bandas organizadas”, entre las que incluye a la Primera Línea, son las que ejercen violencia contra la comunidad LGBT+ y el resto de la población bogotana. Una acusación que Bolívar decidió responder “en honor a nuestros jóvenes estigmatizados como terroristas”.

Bolívar explicó que antes de la Primera Línea ya existía la corrupción, la represión violenta y la quema de CAI, incluso, “bajo el mando de unos candidatos” que participaron del debate, refiriéndose a Molano, entonces ministro de Defensa, y Jorge Luis Vargas, entonces comandante en jefe de la Policía Nacional.

Pero, incluso, decidió ir más allá y cuestionar las pretensiones de ambos candidatos, recordando a los 103 jóvenes que perdieron sus ojos a manos del Esmad: “No me vengan a decir aquí a mí que puede tener autoridad moral para gobernar una ciudad quien le sacó los ojos a sus jóvenes. Los jóvenes no son terroristas, los niños no son maquinas den guerra”.

Ni corto ni perezoso, el general (r) Vargas envió un saludo a los policías que “fueron atacados salvajemente el sábado, cuando, de nuevo, los intentaron quemar en Bogotá”, insistiendo en que “es demasiado sospechoso que el candidato de la Casa de Nariño no haya respondido por qué la Primera Línea esta atacando de nuevo y quiere quemar policías en Bogotá”.

Dijo sentirse preocupado por no tener una respuesta clara sobre por qué decidieron atacar una iglesia católica, que hace parte de la historia de la ciudad y señaló que “la Primera Línea estuvo financiada por las Farc, por el ELN, hay mas de 303 capturados con elementos materiales probatorios (...) instrumentalizados por el hoy candidato de la Casa de Nariño para que cometieran esos delitos”.

Su llamado fue a que el Gobierno se pronuncie de manera pronta y que se dé con la captura de quienes estuvieron detrás de los destrozos, que, según Bolívar podrían ser “policías encapuchados”:

“Los descalifico ¿Por qué no salí a decir nada ayer? Porque no me sentía aludido. Cómo voy a salir a defenderme de lo que están haciendo unos vándalos allá. Aprésenlos. Para eso esta la justicia, yo no soy juez. Yo no sé si son de Primera Línea, aquí tenemos que acudir al debido proceso, primero hacer una investigación a ver quienes fueron los encapuchados, de pronto fueron los mismo policías, yo que voy saber”, precisó, distanciándose del grupo nacido en medio del estallido social, al que, según la investigación iniciada en su contra no habría entregado más que gafas y cascos de protección.