Se levantará el plan de contingencia de la vía Bogotá-Villavicencio para permitir el tránsito de vehículos durante 24 horas a partir del viernes 8 de septiembre. Vehículos de carga y livianos podrán transitar por la carretera sin restricción, a excepción de los buses intermunicipales y flotas, que no podrán prestar servicios en horas de la noche.
“Informamos a la ciudadanía que recorre este importante corredor que desde el día viernes se ha habilitado la circulación durante 24 horas sin restricciones para carga y vehículos livianos”, anunció el ministro de Transporte, William Camargo, luego de una reunión en Villavicencio con alcaldes, gobernadores del oriente y sectores empresariales.
De esta manera se levantará el plan de contingencia que consistía en cierres temporales que permitían el tránsito únicamente entre las 4:00 de la madrugada y las 2:00 p.m. Ahora la restricción solo contará para vehículos de transporte de pasajeros como flotas y buses intermunicipales que no podrán hacer uso de la vía en horas de la noche, para disminuir los riesgos.
“Queremos proteger la vida de los colombianos, por ende, habrá restricción para vehículos de transporte intermunicipal en horas de la noche. De igual manera, hemos dispuesto toda la capacidad técnica y operativa de las entidades adscritas como la Agencia Nacional de Infraestructura y el Instituto Nacional de Vías para realizar inversiones que ya están en ejecución y que permiten disminuir las afectaciones por las condiciones climáticas”, señaló el ministro.
La carretera presenta afectaciones debido a las lluvias, inundaciones y los sismos que se presentaron en el último mes, por lo que avanzan las obras para superar la contingencia. El ministro Camargo sostuvo que en el kilómetro 58 está en construcción un viaducto que se espera terminar pronto. Mientras que se avanza en la reconstrucción del puente sobre la quebrada Estaquecá.
“Tenemos también intervenciones a lo largo del corredor que buscan disminuir las afectaciones por deslizamientos, como en el caso de Guayabetal, donde tenemos concreto lanzado, para disminuir el efecto de deslizamientos que, por incremento de lluvias, podrían estar afectando la operación”, afirmó el ministro.
Sin embargo, la carretera principal de Bogotá a Villavicencio tiene 53 puntos críticos para lo que se requiere la inversión de $1,2 billones de pesos, para poder dar soluciones definitivas, pero no hay recursos disponibles en el presupuesto. Por lo pronto se analizan varias alternativas y se desarrollan obras que permitan mantener la movilidad hacia el oriente.
En la transversal del Sisga hay siete puntos con afectaciones prioritarias mas 11 puentes que requieres reposición, que suman inversiones de $137.000 millones. Las autoridades atienden pérdidas de banca en los kms 35+050, 54+100, 67+900; hundimientos de calzada en los kms 43+220 y 5+600; deformación de calzada en el km 48+600 y movimiento de masa en el km 54+600.
La transversal del Cusiana está completamente cortada a la altura del puente Los Grillos, por lo que la solución presentada es una vía alterna que se está a la espera de iniciar a través del contrato de mantenimiento del corredor Labranzagrande. Además, se evalúa una tarifa diferencial para el peaje Crucero.
El ministro Camargo señaló durante la exposición del plan del Gobierno que la región oriental del país tiene una “geología joven” que sería la razón por la que se presenta inestabilidad de las montañas, fallas geológicas activas, sismicidad en la Cordillera Oriental. Pese a esta situación, no se cuenta con un sistema de monitoreo que permita emitir alertas tempranas al menos en los puntos más críticos.
El Instituto Nacional de Vías Invías anunció una inversión que asciende a 8.41 billones que se ejecutarán en 38 proyectos de intervención de 2.572 kms de vías primarias y 361 obras para mejorar la transitabilidad de 1.053 km de vías rurales.