Más de 10 cabañas VIP funcionaban con energía robada en Juan de Acosta, Atlántico

La empresa Air-e informó que dichas casas de recreo fueron conectadas directamente a una infraestructura de su propiedad, sin contar con autorización para ello

Guardar
Los dueños de las cabañas
Los dueños de las cabañas VIP estarían evadiendo el pago de impuestos por el consumo de energía - crédito Air-e/página web

Por medio de un comunicado de prensa, la empresa de energía Air-e informó que 13 cabañas VIP estaban funcionando con luz robada. Las casas de recreo estaban conectadas directamente a la infraestructura eléctrica de la compañía sin tener autorización.

De acuerdo con Air-e, esta situación se pudo evidenciar gracias a un operativo que se realizó en la inmediación de El Vaivén, en el municipio de Juan de Acosta, del departamento del Atlántico, donde están las cabañas en cuestión.

Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Google News.

“La mayoría de los casos se detectaron en la Urbanización El Jobo en las cabañas Villa Luz, VIP, Villa Lupita, El Diamante, Villa El Gran Aragón y en la Urbanización Valles del Jobo, de tres predios sin identificación”, precisó la empresa en el comunicado.

En varias de estas cabañas hay piscinas, aires acondicionados y otros electrodomésticos que consumen un alto voltaje de energía. Por eso, la defraudación de fluidos equivale a 15 millones de pesos mensuales, según Air-e. Esta cifra representa una falta de pago de 180 millones de pesos al mes, en promedio.

Por esta falta, los propietarios de las 13 cabañas fueron normalizados y tendrán que pagar la totalidad de la energía que dejaron de facturar. Además de eso, tuvieron que presentar la documentación necesaria para activar el servicio de luz en las casas de recreo de manera legal.

“La compañía logró una negociación de pago a través del diálogo directo con los representantes: Mellys Quiroz, Eduardo Muddi, Claudia Roncallo, Fanor Alfonzo Barrios, Guadalupe del Carmen Guerrero, Manuel Coll, Efraín Ruiz, Iván Segrera, Rodolfo Rojas, Andrés Rocha, Lisseth del Carmen Egeo y Neila Arteta.”, añadió Air-e.

Quienes se aprovechan de la prestación del servicio de manera ilegal podrían ser condenados a prisión por hasta 72 meses. Además, por el delito de defraudación de fluidos se verían obligados a pagar multas de hasta 150 salarios mínimos legales mensuales vigentes.

“Los usuarios comerciales se exponen al cierre temporal de su establecimiento o al cierre definitivo en caso de reincidencia, tal y como lo consagra el Código Nacional de Policía y de Convivencia Ciudadana”, detalló el gerente de Servicios Jurídicos de Air-e, Fermín de la Hoz Torrente, citado en el comunicado de prensa.

De acuerdo con la empresa de energía, junto con la Fiscalía General de la Nación (FGN) se están adelantando casi 440 investigaciones por los delitos de hurto y de defraudación de fluidos. Además, 183 personas han sido capturadas por este último y por concierto para delinquir.

En esa medida, Air-e agradeció a la ciudadanía por denunciar los casos de robo de energía, puesto que esto han ayudado a la empresa y a las autoridades a actuar de manera “contundente”.

Robos de energía en Bogotá y Cundinamarca

En lo corrido de 2023
En lo corrido de 2023 ya se han reportado más de 1.000 denuncias por robo de energía, según Enel Colombia - crédito Flavio Lo Scalzo/Reuters

Enel Colombia dio a conocer en junio de 2023 que 1.250 denuncias por hurto de energía han sido reportadas en lo corrido del año. Quienes han logrado robar luz se han valido de diferentes métodos para evadir la medición de energía, como la alteración de los medidores y, como sucedió con las cabañas del Atlántico, con la conexión directa a postes de energía.

De acuerdo con la compañía eléctrica, las pérdidas de cables, los intentos de robo de energía que han generado accidentes y las caídas del servicio se han presentado con mayor frecuencia en las localidades de Bosa, Kennedy, Fontibón, Usme, Ciudad Bolívar, Barrios Unidos y Suba, ubicadas en Bogotá.

Estas mismas situaciones se han registrado en mayor medida en los municipios de Soacha, Zipaquirá, Madrid, Funza, Ubaté, Facatativá, Girardot, Flandes, Silvania y Fusagasugá, ubicados en Cundinamarca.

“Desde Enel Colombia buscamos reducir y erradicar el hurto de energía, con el fin de preservar la seguridad de nuestros clientes y de la misma infraestructura. Por eso, hemos acudido ante las autoridades competentes para iniciar acciones legales contra quienes cometen este delito. Solo en 2022 el hurto de energía fue de 230GWh/año, equivalente al consumo mínimo vital de energía eléctrica de Chía, Zipaquirá y Cajicá durante un año en Colombia, aproximadamente 145.000 hogares”, explicó el gerente General de Enel Grids en Colombia, Francesco Bertoli, citado en un comunicado.
Guardar