Dentro de los acuerdos alcanzados por las delegaciones del Gobierno nacional y el ELN durante el cuarto ciclo de conversaciones en Caracas (Venezuela) se determinó la creación de zonas críticas para realizar acciones y dinámicas humanitarias.
Según el pronunciamiento conjunto, estas serán instaladas en el Bajo Calima (Valle del Cauca) y San Juan (Chocó); el nordeste antioqueño y el sur de Bolívar. En estas dos últimas se adelantarán, además de los temas humanitarios, el cumplimiento de del cese al fuego bilateral y la participación de las comunidades en la mesa de diálogos debido al impacto del conflicto.
Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Google News.
Concretamente, esas cuatro regiones fueron escogidas por las partes para adelantar las acciones humanitarias debido a cuatro factores, todos relacionados con la guerra interna, la disputa entre la guerrilla y otros grupos ilegales, y la falta de presencia estatal para atender las principales problemáticas de las comunidades.
De acuerdo con lo precisado en primer momento por Caracol Radio, fueron seleccionadas aquellas zonas debido a las múltiples violaciones a los derechos humanos, incluyendo asesinatos, amenazas y hechos de desplazamiento y confinamiento a causa de los constantes enfrentamientos.
En esa medida, el segundo aspecto analizado fue la fuerte represión contra civiles en el sentido de masacres cometidas y otros hechos violentos en contra de integrantes de comunidades raizales, palenqueras, negras e indígenas.
También se tuvo en cuenta la connivencia de autoridades militares o civiles, incluyendo todas las actividades relacionadas con el paramilitarismo; así como las avanzadas de grupos armados ilegales, incluyendo las acciones perpetradas por agentes paraestatales en zonas de presencia del ELN.
Otros apartados de lo acordado
También fue anunciada la ejecución de proyectos de inversión social con el acompañamiento del Departamento Nacional de Planeación, además del desarrollo de mecanismos concretos para la atención de personas privadas de la libertad reconocidas como integrantes del ELN y recluidas en centros penitenciarios de Colombia.
A lo largo del cuarto ciclo se abordaron cinco puntos: el primero se centró en la consolidación del Comité Nacional de Participación mediante la creación de cinco comisiones para elaborar de forma definitiva el plan de participación nacional. También fue recibido el primer informe mensual de gestión sobre el balance del cese al fuego, incluyendo la puesta en marcha de siete instancias regionales.
Las partes también manifestaron “la suscripción de una carta de intención con el Sistema de Medios Públicos de Colombia (Rtvc) Señal Colombia para difundir los avances del proceso de paz” y un recorrido de ambas delegaciones en los territorios para realizar actividades correspondientes al cese bilateral. Con esta medida, las partes esperan crear un clima favorable para el desarrollo de las elecciones regionales el domingo 29 de octubre.
“Agradecemos al pueblo y al Gobierno de Venezuela por acoger las labores de la mesa de diálogos para la paz durante estas semanas, así como la presencia de los países garantes, acompañantes permanentes y el grupo de países de Apoyo, Acompañamiento y Cooperación (Gpaac)”, concluyó el documento sobre el quinto punto de la mesa.
Tema aparte, días después del cuarto ciclo de conversaciones, se habló de Colombia como posible sede de la quinta fase del proceso de paz. Sin embargo, se confirmó que México, país que ya acogió el segundo periodo de diálogos, será la nueva sede.
De hecho, en la nación norteamericana fue establecida la agenda de seis puntos que marcó una hoja de ruta en todo el proceso. Esta no solo incluyó la participación de actores civiles en la mesa, sino también una eventual discusión sobre el fin del conflicto.