Una verdadera tormenta para el Gobierno del presidente de la República, Gustavo Petro, causaron las declaraciones entregadas por su hermano, Juan Fernando Petro, en las que se refirió no solo a una condición del jefe de Estado, de la cual se retractó, sino también a la campaña que llevó al candidato del Pacto Histórico a la Casa de Nariño para el periodo 2022-2026.
En entrevista concedida al programa Los Informantes de Caracol TV, el hermano del presidente no solo contó que el actual mandatario fue diagnosticado con el síndrome de Asperger: trastorno conocido actualmente como un tipo de Austismo, que comprende el comportamiento que afecta la capacidad de socializar y comunicarse con efectividad; en una revelación que causó todo un debate en las redes sociales, acerca de si es un aspecto que hace parte del entorno privado.
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Sino también por sus afirmaciones, según las cuales el jefe de Estado fue elegido para el cargo, en parte, gracias a los votos que —según él— se gestionaron en las visitas a las cárceles. En sus cuentas, más de un millón de sufragios, en regiones en las que históricamente Petro no había tenido buenos resultados. Una especie de confesión que causó un fuerte remezón en los sectores políticos.
“El Urabá y el Magdalena Medio, dirigidos desde las cárceles, lograron una votación que Uribe lo entendió, él lo dijo: ‘Me parece raro, curioso y extraño que en lugares donde Petro no podía ni llegar, ahora gana masivamente’. Nosotros vimos que, entre el Norte de Santander, entre el Urabá antioqueño, entre el Magdalena Medio, Gustavo obtuvo un millón y pico de votos que no tenía antes. Ahora, si te das cuenta, con ese millón y pico de votos fue que ganó”, expresó.
Es válido precisar que, cuando se supo de las visitas del hermano del mandatario a centros de reclusión como la cárcel La Picota de Bogotá, surgió en marzo de 2023 la versión según la cual su papel era de negociar beneficios para extraditables y detener así su traslado a Estados Unidos. A lo que el hombre indicó que fue usado como “gancho ciego”, para hacer negociaciones en nombre de la paz.
No obstante, sus revelaciones suponen un asunto delicado para el Gobierno, porque podría ser la prueba reina de que se establecieron pactos para beneficiar a cabecillas de organizaciones delictivas, como El Clan del Golfo, a cambio de que entreguen bienes, información y recursos de origen ilícito. Sobre este asunto, el presidente todavía no ha emitido pronunciamiento alguno.
“...Ellos (Clan del Golfo) dijeron: ‘De una’. De hecho, el Clan decía: ‘Nosotros entregamos el 90% de lo que tenemos. Que nos dejen el 10% para trabajar en los territorios’. Porque eso sí: ¿A cambio de qué? ¿De una extradición? No. ¿De una cárcel? No”, enfatizó el hermano de Gustavo Petro.
Juan Fernando ha hecho parte de lo que se conoce como la Comisión Intereclesial de Justicia y Paz, que desde 2002 ha impulsado temas de esta índole en las penitenciarías del país. Aunque la controversia que causó su encuentro con Iván Moreno Rojas, condenado por el cartel de la Contratación en Bogotá; el excongresista Álvaro García y otros políticos del orden nacional; con el fin de promover el llamado “perdón social”.
La clave en los territorios para ganar la presidencia
Según Juan Fernando Petro, una de las claves para que Petro lograra el respaldo en estas regiones fue, justamente, la propuesta de entregar beneficios jurídicos a cambio de firmar la paz, de la mano del hoy comisionado de paz, Danilo Rueda. No obstante, pese a que su labor en los centros carcelarios iba enfocada en ese sentido, salió a cuestionar el viraje que tuvo esta iniciativa en la implementación, con la llamada paz total.
“Todo el mundo sabe que el comisionado y yo éramos uña y mugre en los territorios. Y nosotros nos fuimos y lo hicimos. Dialogamos y generamos la confianza para que ellos al otro lado dijeran: ‘¿Sabe qué? Sí, nos podemos meter en este cuento. Me gusta la propuesta, la idea. Trabajemos por la paz de este país conjuntamente’. Se ganó la Presidencia, se logró que Danilo fuera el alto comisionado”, contó.
No obstante, de acuerdo con su postura, todo cambió debido a que la Comisión de Paz del Congreso no tiene la misma visión que tenían ellos del proyecto. “Cogió a Danilo, lo aleccionó, Le sacó punta, lo sentó y lo puso a trabajar a la manera como siempre se ha trabajado y por eso es que nunca hemos llegado a nada. Y así va describiendo lo que en su opinión ocurre de puertas para adentro en la casa de Nariño”, acotó.