La peligrosa práctica de jóvenes en bicicleta que se agarran a los buses del SITP en Bogotá

En el sur de Bogotá se conoció una práctica peligrosa por parte de jóvenes que se movilizan en bicicletas. Varios menores de edad se amaran a los buses del Sitp con cuerdas y alambres, mientras bajan las pendientes de las calles a gran velocidad.

En diálogos con el Ojo de la noche, en la localidad de San Cristóbal uno de los jóvenes que baja a diario en su vehículo dijo que “todo lo hacemos nosotros: nos hemos subido de a dos (en la bicicleta)”, confesó Juan Carlos.

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El joven explicó que la bicicleta que usa fue fabricada por él mismo, que cuenta con un pequeño sillín de color rojo. La única protección que tiene son guantes y rodilleras. Sin embargo, el joven pone en peligro su vida pues esta práctica la realiza en horas de la noche, sin reflectores ni cascos protectores.

Juan Carlos también resaltó que su recorrido inicia en el Portal 20 de Julio, donde espera algún bus del SITP o alimentador, para trasladarse hasta el barrio Juan Rey, ubicado en una loma.

“Cada localidad tiene su grupo de gravity. Mi madre me apoya. Me dice que tenga cuidado. Qué baje suave”, indicó el joven.

De igual manera, el menor de edad explicó la manera como “se engancha” al bus: “El ganchito, vea. Usted dobla una puntilla y la amarra ahí. Tiene que ver que quede bien seguro porque o si no se le suelta y puede quedar abajo de algo”, sostuvo.

Durante la entrevista a Noticias Caracol, el joven contó que su decisión al realizar esta práctica es por la adrenalina que siente. “Sí, sí es arriesgado. Pero usted sabe que es lo que le gusta a uno: la adrenalina”. En cuanto al riesgo que se enfrenta cada vez que baja una loma, es consciente de que puede perder su vida, pues “son cosas que a uno le pasa cuando va bajando. El riesgo que uno corre. La vida. Pero por eso uno tiene su protección, sus guantes y rodilleras por si se llega a caer”.

Estas prácticas se conocen con el nombre de gravity bike y su origen es en Estados Unidos, donde se practica desde hace 26 años. Es un deporte extremo en el que las bicicletas son modificadas para tener mayor velocidad en la bajada: no tienen frenos, el sillín es más amplio, el manubrio tiende hacia el piso y algunas tienen unas pesas en la parte delantera.

Dos ladrones fueron capturados en el norte de Bogotá luego de atracar a una mujer. Los delincuentes tenían azotado el sector de la calle 100, cerca a la carrera Séptima, donde se movilizaban a sus anchas en bicicleta y atracaban a los transeúntes amenazándolos con armas de fuego para que entregaran sus pertenencias.

Según indicaron las autoridades, los delincuentes pasaban desapercibidos por moverse en bicicleta y cuando sus víctimas se descuidaban, las abordaban y las amenazaban de muerte apuntándoles a la cabeza.

En diálogo con Blu Radio una de las víctimas de los delincuentes narró cómo la atracaron. “Mientras me acercaba a mi hogar por el área cercana al CAI Contador en la calle 100, uno de los individuos se me acercó de manera frontal. En ese momento, no tenía idea de a quién se dirigía, pero de repente, me ordenó voltearme y apuntó su pistola directamente a mi frente. Me exigió que entregara todas mis pertenencias, amenazando con matarme si no cumplía sus demandas”, sostuvo.