Mataderos municipales: los responsables de las condiciones sanitarias serían los propietarios

La senadora Andrea Padilla criticó la medida impulsada por el presidente Gustavo Petro para bajar el precio de la carne. Según una versión del decreto que compartió, los tenedores de los establecimientos serán los encargados de velar por la salubridad de los productos

La senadora Padilla cuestionó la propuesta de reabrir los mataderos municipales argumentando que fueron cerrados por sus condiciones de salubridad. (Colprensa)

La senadora Andrea Padilla, de Alianza Verde, criticó la reapertura de mataderos municipales que anunció como propuesta el presidente Gustavo Petro para bajar el precio de la carne en Colombia. Según informó el ministro de Salud, Guillermo Jaramillo, ya está listo el decreto que daría luz verde a la cuestionada iniciativa.

Padilla publicó en su cuenta de X (Twitter) un segmento de lo que sería dicho decreto, alertando sobre información consignada en el artículo 12, referente a los propietarios o tenedores de los establecimientos.

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“Les pido a los medios poner el ojo en el tema de los #MataderosMunicipales ¡Según esta versión del decreto, los responsables serán los mismos propietarios de los mataderos!”, sostuvo la senadora en la red social.

En efecto, el texto que publicó Padilla muestra que quienes quieran abastecer de productos cárnicos comestibles a sus municipios, deberán contar con una autorización del Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima), que determinará si pueden poner a funcionar su planta de beneficio animal categoría de autoconsumo.

“Una vez obtenida la autorización, los propietarios o tenedores de las plantas de beneficio categoría de autoconsumo son los responsables de mantener las acondiciones sanitarias del establecimiento determinadas para el funcionamiento de la planta de beneficio categoría autoconsumo”, se lee en el documento compartido por Padilla.

El Invima dio a conocer las condiciones mínimas que deben tener las plantas de beneficio para funcionar. La primera exigencia es que el ICA determine que existen condiciones especiales de sanidad animal. La segunda, que se evidencien dificultades de conexión terrestre con otros municipios donde hay plantas de beneficio a las que es difícil llegar. La tercera y última corresponde a que se demuestre que hay problemas de abastecimiento desde las plantas existentes.

“Cabe recordar que las plantas de beneficio animal de carácter público que quieran ser habilitadas deben estar priorizadas en los planes de racionalización de plantas de beneficio definidos por los departamentos deben dar cumplimiento al procedimiento para la obtención de la autorización sanitaria y registro por parte del Invima. Además, sus condiciones sanitarias deben garantizar la inocuidad de la carne y los productos cárnicos comestibles. Una vez habilitadas por el Invima, contarán con inspección oficial”, expuso la entidad.

Por su parte, la senadora Padilla enlistó varios aspectos que critica sobre la reapertura de los mataderos municipales. Entre ellos está el motivo por el cual se fueron cerrando con el paso de los años; alega que fue por las condiciones de salubridad y por el trato hacia los animales.

Facilista, riesgosa y regresiva la medida que toma el presidente Petro de reabrir los mataderos municipales con la justificación de bajar el costo de la carne. Si estos lugares repugnantes y peligrosos se fueron cerrando, más de 1.000 en los últimos 15 años, desde la expedición del Decreto 1500 de 2007, fue por su insalubridad y muy seguramente por las condiciones extremas de crueldad con los animales”, sostuvo la congresista en X.

Asimismo, aseguró que el Estado no cuenta con la capacidad humana, técnica y financiera para garantizar que se cumplan las condiciones de salubridad que se requieren para la venta de productos cárnicos en estos establecimientos.

“Si la intención es bajar el costo de la carne, bueno sería que el presidente tomara la decisión de frenar las exportaciones marítimas de bovinos vivos, los “barcos de la muerte”. Esas exportaciones crecen y crecen; de 75.000 en 2019 pasamos a 378.000 en 2022, desabasteciendo el hato interno y libres de impuestos para los felices exportadores”, añadió la senadora.

Además, se refirió al impacto ambiental que tiene la ganadería en Colombia, señalando que en el país solo se usa el 23% de tierra apta para actividades agrícolas. Sin embargo, esta cifra se duplica para la ganadería. “Es lo que se ha llamado la ganaderización de la tierra agrícola. En esto es que deberían concentrarse los esfuerzos y la cacareada reforma rural, no en abrir más mataderos”, puntualizó Padilla en la red social.