La senadora Piedad Córdoba se despachó en una intervención en la Comisión Séptima del Senado en contra del poderoso empresario Luis Carlos Sarmiento Angulo, los medios de comunicación e incluso el proyecto que busca reducir el salario de los congresistas. En medio de su intervención comparó el trabajo de los congresistas con el de las prostitutas de Hamburgo.
Aunque la discusión giraba en torno al control político del Presupuesto General de la Nación, la senadora Córdoba tomó la palabra para referirse a diversos temas, desde la corrupción del caso Odebrecht hasta anticiparse al debate del día siguiente sobre la reducción de salarios de los congresistas.
En el debate estaba citado el ministro de Salud, Guillermo Jaramillo, quien expuso el presupuesto del sector y la necesidad de los recursos de la cartera para fortalecer el sistema. A esa defensa, Córdoba encargó que se tenga en cuenta la medicina tradicional y las parteras como actores de la salud en el país.
Pero la presencia de Jaramillo le trajo un recuerdo a Córdoba que motivó la frase que causó revuelo de su intervención. “Voy a decir que el ministro también se tuvo que exiliar y yo lo recibí con los brazos abiertos en Montreal donde yo estaba exiliada. O sea, no ha sido fácil. Es que los senadores y senadoras trabajamos como las prostitutas de Hamburgo, en vitrina, a nosotros nos ven todo, todo”, sostuvo.
Antes los comentarios que desató su intervención, la senadora reiteró los señalamientos en contra del Grupo Aval y Odebrecht. Además, sostuvo, que su relación con el magnicidio en Ecuador es una estrategia de los medios de comunicación para “enlodar la imagen de los demócratas y revolucionarios”.
Las jornadas en el Senado de los últimos días han sido utilizadas por Córdoba para su defensa, debido a que ha sido relacionada con el asesinato de Fernando Villavicencio, candidato presidencial de Ecuador. Por eso no estuvo presente durante todo el debate porque salió a dar una rueda de prensa al respecto.
La senadora del Pacto Histórico también invitó a sus colegas para no dejar que se obstruyan los debates necesarios, como considera que lo hacen los lobistas y los proyectos populistas.
“Yo tengo una preocupación muy grande ministro y compañeros y compañeras. El señor Sarmiento Angulo le untó el bolsillo a los partidos y no precisamente porque los quiera mucho, sino porque lo que quería es que todos esos partidos y movimientos se opusieran a las reformas. Eso no solamente es muy mal visto, es una circunstancia degradante por una persona que no responde ni por Odebrecht ni por el tema Aval. Este señor obstruye la tarea legislativa”, señaló Córdoba.
Según ella, el debate de la reforma a la salud no ha logrado avanzar por presiones externas. Pero también se suma a otros proyectos que para ella no están bien estructurados y buscan popularidad, en lugar de resolver problemáticas sociales, como lo dijo al referirse a la reducción de salarios que presentó Jota Pe Hernández.
“Jota Pe (dice) que hoy nos va dizque a clavar un proyecto de ley para rebajar del salario, pero yo me pongo a pensar ¡qué inmediatez! ¡Qué falta de profundizar en los temas! ¿Saben cuánto se gana un vicepresidente de Ecopetrol? 108 millones de pesos, ¿saben cuánto se gana un procurador delegado? 44 millones de pesos. Entonces por qué no hacemos una propuesta que tenga que ver con todo lo que son los salarios del sector público. Solamente para quedar bien: feliz la opinión pública bajándonos el salario a nosotros”, señaló Córdoba.
La senadora señaló que ella sí recibe su asignación mensual para sus gastos personales, pero hay otros congresistas que no viven del salario, lo entregan a sus movimientos o utilizan su curul para sostener los negocios que ostentan. “Entonces ese populismo legislativo que además nos induce a distorsionar y obstruir como es en el caso de la salud no puede seguir siendo”, señaló.