Tren de Aragua estaría amenazando de muerte al comandante de la Policía de Bucaramanga: “Saque a toda su familia de acá”

Las intimidaciones fueron enviadas por redes sociales a través de perfiles falsos, y serían una retaliación por el desmantelamiento de un laboratorio de droga en la capital santandereana

Comandante de Policía de Bucaramanga, general José James Roa, fue amenazado de muerte. Foto: Twitter

En las últimas horas el comandante de Policía de Bucaramanga, general José James Roa Castañeda, denunció que ha recibido amenazas contra su vida y la de su familia, después de adelantar un duro golpe contra la banda delincuencial de alias ‘Pichi’, que busca apoderarse del negocio de la droga en la capital santandereana.

“General le voy a dar un consejo, nunca salga de permiso y saque a toda su familia de acá, le informo oficialmente, está sin reversa de que su nombre se borre en la lista negra del plan pistola”, le escribieron al uniformado durante una transmisión que se realizaba en la página de la Radio Policía Bucaramanga.

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Así lo dio a conocer el brigadier general en las últimas horas, informando que las bandas criminales de alias Pichi y alias ‘Poporro’, dos capos del narcotráfico que se disputan el tráfico de drogas en las calles de Bucaramanga, serían las autoras de los mensajes intimidatorios. El uniformado también aseguró que su misión es acabar con los negocios ilícitos del área metropolitana, y que no dejará intimidarse por la delincuencia.

“Fue por los resultados que hemos logrado. Hay algún delincuente que le duelen estos logros de nuestros hombres. Si un Policía se deja amedrentar no tendríamos estado. Seguiremos con estos operativos y todos estamos comprometidos con la seguridad de nuestra Área Metropolitana de Bucaramanga”, señaló el general a la Vanguardia.

El brigadier también manifestó que este tipo de amenazas lo motivan para ejercer más golpes contra los delincuentes, porque es la única forma de demostrar la solidez de la institución. “En la Policía Nacional nos han enseñado que es el crimen no paga, y por eso vamos a combatirlo en todas las especialidades, y que ningún bandido sencillamente puede venir su imperio del desorden en el área Metropolitana de Bucaramanga”, enfatizó el uniformado.

Cargamento incautado por la Policía de Bucaramanga a la banda de alias 'Pichi'. Foto: Twitter

Asimismo, señaló que no hará uso de más policías para protegerse de un posible atentado y que confía plenamente en su esquema de seguridad. “Tengo mi esquema de seguridad y sencillamente no tengo temor, por el contrario, seguiremos trabajando de la mano con cada uno de los ciudadanos del área metropolitana de Bucaramanga, y no voy a poner más hombres a mi esquema de seguridad, porque esos hombres los necesito para que sigan combatiendo la inseguridad”, indicó el general en rueda de prensa.

Y es que las amenazas vendrían como represalia del golpe que propinó la Policía de Bucaramanga el pasado 7 de agosto, cuando logró desmantelar un centro de fabricación y procesamiento de estupefacientes, que era de los principales proveedores de Bucaramanga, Girón, Piedecuesta y Floridablanca, y haría parte de la estructura delincuencial liderada por Óscar Camargo Ríos, alias Pichi.

Durante el operativo en el barrio El Cinal de la capital santandereana, las autoridades incautaron una cantidad importante de dosis que estarían próximas a distribuirse en el área metropolitana.

“En este golpe logramos incautar más de 50 mil dosis, con un valor estimado de $250 millones, la captura de un hombre y la aprehensión de un adolescente. Llamó la atención la ubicación de este laboratorio dado que se encontraba en una zona muy cercana a un barrio, aspecto que no es común en zonas urbanas y menos en el área metropolitana”, señaló el brigadier en su momento.

Lo que preocupa es que alias Pichi fue detenido por las autoridades en diciembre de 2020 y desde entonces permanece recluido en un centro penitenciario de Valledupar. Sin embargo, este hombre estaría coordinando desde la prisión a sus hombres, y sería el principal sospechoso de las amenazas contra el comandante de la Policía.

Además del delito de tráfico de estupefacientes, contra Pichi recaen cargos por los delitos de tortura, homicidio agravado, desaparición forzada y porte ilegal de armas de fuego, por lo que las investigaciones apuntarían a él como el autor intelectual de las intimidaciones contra el general Roa.