Los patrulleros de la Policía Metropolitana de Barranquilla identificados como Jorge Eliécer Payares Buelvas y Jorge Arroyo Peñalver, recibieron una pena de casa por cárcel mientras se adelanta un proceso en su contra por hurto calificado.
Según pudieron establecer los investigadores de la Fiscalía, los hechos se produjeron el 20 de enero del año en curso, cuando los dos uniformados presentaron una falsa orden judicial de allanamiento a una casa en el barrio Los Robles de Barranquilla.
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El informe de las autoridades indicó que los uniformados ingresaron sobre las 3:00 a. m. a la vivienda e intimidaron con sus armas de dotación al propietario y a sus familiares, a quienes amordazaron y despojaron de sus pertenencias. Los policías no se quedaron solo con las prendas y celulares de las víctimas, sino que registraron toda la casa para sustraer más objetos de valor y dinero. En total el robo fue cercano a los 40 millones de pesos y huyeron del lugar en vehículos oficiales de la institución.
Inicialmente se dijo que los ladrones eran civiles disfrazados de policías; sin embargo, la Fiscalía pudo establecer que en realidad eran integrantes de la Policía Metropolitana de Barranquilla. Los detenidos no aceptaron los cargos que les imputaron por los delitos de abuso de la función pública, peculado por aplicación diferente y hurto calificado y agravado.
Más policías capturados por corrupción
El 2 de agosto efectivos de contrainteligencia de la Policía capturaron a tres mayores y un patrullero, señalados de filtrar información de la institución a grupos delincuenciales y redes de narcotráfico.
“Con dolor de patria, pero con el firme propósito de hacer de la honestidad el más importante de los lineamientos institucionales, culminamos investigación propia que compromete a 3 mayores y un patrullero en actos que mancillan honor policial. Deberán responder ante la justicia”, dijo el director general de la Policía, William Salamanca.
Las investigaciones establecieron que los cuatro uniformados capturados estaban relacionados con los delitos de robo de hidrocarburos y combustibles.
En Medellín condenaron a dos patrulleros de la Policía identificados como John Edilson López Hurtado y Luis Anderson Pineda Hincapié por actos de corrupción que se remontan al 2019, cuando abordaron a un hombre en un hotel ubicado a las afueras de la capital antioqueña y le exigieron una alta suma de dinero para no hacer efectiva una orden de captura que tenía en su contra.
Las investigaciones internas de la Policía determinaron que los patrulleros estaban extorsionando al hombre, quien no tenía antecedentes judiciales ni órdenes de captura en cu contra. El comerciante afectado accedió a la extorsión y alcanzó a pagar $500.000 para que los uniformados no lo capturaran.
Un Juez Penal del Circuito condenó a 9 años y 9 meses de prisión a John López Hurtado, de 35 años; y Luis Pineda Hincapié, de 36 años por los delitos de extorsión, abuso de la función pública y peculado por aplicación diferente.
Desde la institución le informaron a la revista Semana, que las capturas y condenas por corrupción hacen parte de una orden dictada por el presidente Gustavo Petro al general de la Policía William Salamanca, quien adelanta una política de cero tolerancia para los uniformados que se aparten de la ley.
“Lo he mencionado en anteriores actividades y vuelvo a repetirlo, si algo puede producir el deterioro de la sociedad colombiana, la destrucción de sus instituciones, la degradación integral de nuestro pueblo es que la Policía Nacional termine vinculada a procesos de cooptación por parte precisamente de quienes deben combatir las organizaciones internacionales y nacionales del crimen”, dijo el jefe de Estado en una de sus alocuciones públicas.