Un espacio muy recordado por los colombianos (especialmente por los que seguían la franja del mediodía) era Estilo RCN, un magacín que abordaba temas de farándula y estilo de vida de lunes a viernes, luego de la emisión de Noticias RCN. El programa se mantuvo entre 2004 y 2016 y por allí desfilaron presentadoras que todavía hoy son reconocidas como referentes en el medio.
Nombres como Cristina Hurtado, Sara Uribe, Jessica Cediel, Natalia Durán, Laura Tobón o Daniella Álvarez fueron algunos de los rostros que desfilaron por allí durante ese periodo. Uno de los más recordados fue el de Lina Polanía, quien presentó Estilo RCN entre 2007 y 2013, labor que alternó siendo rostro de distintas marcas durante ese tiempo.
Pero desde que terminó su participación en el programa de televisión, la huilense decidió mudarse a los Estados Unidos. Inicialmente lo hizo motivada por su relación con Javier Motta, huilense como Lina y quien llevaba varios años radicado en el país norteamericano. Aunque la decisión fue un acierto desde el principio, puesto que siguen juntos hasta la fecha, le resultó más difícil retomar su carrera profesional.
En una entrevista en el programa matutino del Canal RCN, Buen día, Colombia, Polanía contó que no tuvo oportunidades de trabajar como presentadora o estar vinculada a los medios de comunicación, por lo que tuvo que recurrir a otra clase de empleo mientras se presentaba dicha oportunidad:
“Vendí propiedades, saqué mi licencia porque no me podía quedar en la casa esperando. Todo esto pasó porque necesitaba madurar, aprender cosas. Es dificilísimo cuando no te conoce nadie, cuando no sabes hacer algo y necesitas aprender. Eso te lleva a actuar de otra manera, a aceptar otras cosas y priorizar temas”
Este proceso tardó dos años, pero rindió sus frutos porque finalmente logró tener la oportunidad de trabajar en medios de comunicación. Actualmente, Lina Polanía es un referente en lo que se concierne a la moda dentro de los medios estadounidenses y es la creadora del programa Girls O’clock, donde produce y presenta junto con la ecuatoriana Fiorella Solines.
Dicho programa se emite a través de la señal de RCN Internacional y en él se aborda todo lo relacionado con el ámbito de la moda y las pasarelas más importantes a nivel internacional. Ese conocimiento, señaló Lina Polanía, en buena medida llegó gracias a su paso por Estilo RCN:
“En ‘Estilo RCN’ me hice experta en moda sin querer queriendo. La moda me ha perseguido toda la vida y hasta ahora caigo en la cuenta. ‘Estilo RCN’ era el referente de moda en Colombia, entré sin saber nada, ni leer un teleprónter… Me gané un concurso a los 20 años y después de 7 años estando en el Canal salí como una profesional, una persona reconocida”
Semanas atrás, Lina Polanía habló en La Red de Caracol Televisión sobre esta experiencia en los Estados Unidos, y contó que sus primeros años allá estuvieron marcados por la insistencia golpeando puertas, pero sin éxito:
“Empecé a golpear puertas, a conocer a uno o al otro, iba a castings pero nunca pasé ni uno porque había 70 viejas más divinas la una que la otra… yo decía ‘¿a qué me vine acá?’”
Tras incursionar en las bienes raíces, la huilense contó que la oportunidad que le cambió la vida y le permitió regresar a la televisión llegó pero no para estar delante de una cámara, sino detrás de ella, cuando un productor de CNN en español le propuso coproducir un programa. Esto le permitió a Lina tener conocimientos de lo que requiere producir un programa, los cuales no tenía antes de llegar a Estados Unidos.
En la charla reconoció que, en cierto modo y debido a su éxito en la televisión colombiana, tuvo que replantearse algunas cosas que daba por sentadas en Colombia una vez llegó a Estados Unidos, y eso fue clave cuando llegó el momento de poner en marcha Girls O’clock:
“Cuando yo viví acá (en Colombia) yo era presentadora, y ahí tu eres una figura pública. Me doy cuenta que la humildad es lo más importante en un país como ese. Entonces, me enfrenté a un momento donde me doy cuenta que no soy nadie allá. No es que el ego me haya pegado duro, pero si entendí la importancia de estar con los pies en la tierra”