Se cumplieron ya 17 días desde que seis mineros quedaron desaparecidos tras un trágico accidente ocurrido en la mina de Nechí, ubicada en la zona rural que divide a los municipios de Amagá y Fredonia, en el departamento de Antioquia, Colombia.
La Agencia Nacional de Minería (ANM) fue informada de la situación el pasado 20 de julio y de inmediato activó el plan de atención a emergencias mineras. Hasta la fecha, ocho funcionarios de la entidad y 45 socorredores han trabajado incansablemente en tres turnos para llevar a cabo las labores de bombeo del agua que inundó la mina, lo que dificulta la búsqueda de los mineros desaparecidos.
Desde el inicio de los esfuerzos, el personal realiza más de 380 horas de trabajo, en el que utilizan cuatro electrobombas para evacuar un total de 40,13 millones de litros de agua; es decir, 140 mil litros por hora. Gracias a estos avances, se ha logrado desaguar 63,5 metros de los 160 metros que se requiere liberar de agua en la mina.
La ANM expresó su compromiso en brindar todos los recursos a su alcance para atender esta emergencia minera y continuar con los esfuerzos de rescate. Se ha instalado ventilación mecanizada dentro de la mina para garantizar condiciones atmosféricas óptimas para el personal especializado que debe ingresar a mover las electrobombas.
El apoyo en las labores de rescate ha contado con la colaboración de la Alcaldía y los bomberos de Amagá, así como la Gobernación de Antioquia, además, socorredores de las empresas El Roble, Antioquia Gold, Continental Gold y Carbones San Fernando que se unieron en esta misión humanitaria.
La ANM asegura que continuará sin interrupciones con las labores de atención a la emergencia, priorizando la búsqueda y rescate de los mineros desaparecidos en la mina Nechí. Mientras tanto, la comunidad local y las autoridades regionales siguen unidas en la esperanza de encontrar a los mineros con vida y brindar apoyo a las familias afectadas por este suceso.
Estimaron tres semanas para encontrar a los mineros atrapados en Amagá
El rescate de los seis mineros que quedaron atrapados en una mina subterránea de carbón en Amagá, Antioquia, el pasado 20 de julio, podría prolongarse por dos o tres semanas más, según informaron fuentes cercanas al medio El Colombiano.
La emergencia se desencadenó alrededor de la 1:00 p. m. del jueves 20 de julio, cuando una inundación súbita ocurrió en el interior de la mina. Hasta el momento, las hipótesis sugieren que el accidente se originó cerca de 280 metros desde la entrada de la mina, donde una bolsa de agua acumulada en un socavón contiguo cedió durante trabajos de perforación.
Hasta el domingo 30 de julio, los organismos de rescate lograron evacuar 1.872.000 litros de agua de la mina, pero aún quedaban 3.486.000 litros por drenar, a una profundidad aproximada de 120 metros. Para ese momento, con casi diez días de labores de bombeo, se estimó que se requerirán otras dos o tres semanas para que el socavón se lograra drenar y llegar al nivel donde se presume quedaron atrapados los mineros.
Rubén Darío Gómez, uno de los socios de la mina, indicó que el socavón contiguo donde se acumuló la bolsa de agua podría tratarse de una explotación ilegal abandonada hace años, ya que no estaba registrada en los mapas de la empresa, de acuerdo con el medio en mención.
Los mineros desaparecidos son: Héctor Fabio Osorio, de 40 años; José Román Giraldo, de 56; Luis Eduardo Serna Quintero, de 36; Robinson Arbey Gutiérrez, de 36; Jhon Muriel Serna, de 49; y Hernán Darío Guisao, de 32.
A pesar de ello, han transcurrido dos semanas desde que ocurrió el accidente y hasta el momento no se ha obtenido ninguna señal de los mineros que quedaron atrapados en la mina. Por el momento, la incertidumbre y la angustia prevalecen entre los familiares y la comunidad, quienes esperan un desenlace positivo y el pronto regreso de los mineros.