La Corte de la provincia tailandesa de Koh Samui aprobó la solicitud de arresto en contra de Daniel Sancho Bronchalo, de 29 años, principal sospechoso de haber asesinado y desmembrado el cuerpo del cirujano colombiano Edwin Arrieta Arteaga, de 44 años, en una habitación de hotel de la isla de Koh Phangan.
Se cree que ambos habrían estado envueltos en una relación sentimental por un año. El español fue detenido en la estación de policía de Phangan, y deberá enfrentar los cargos de asesinato premeditado, ocultamiento, y de remoción de las partes del cuerpo para ocultar la muerte o las causas de la muerte.
El teniente general Surapong le dijo al diario Bangkok Post que, al momento de ser detenido, el sospechoso aparentaba estar relajado. Por lo pronto, la Policía provincial y turística siguen recolectando las evidencias e interrogando al español; solo hace falta encontrar las partes del cuerpo que él mismo dijo que arrojó al mar.
La primera versión que Sancho entregó al ser capturado fue que Arrieta llegó hasta su habitación a pedirle sexo, pero que él no aceptó y como el colombiano enfureció, él lo empujó y lo hizo caer, haciéndolo golpear en la cabeza contra la tina y produciéndole la muerte. Sin embargo, las autoridades no creyeron esta versión dado que la evidencia apunta a que la muerte fue premeditada.
Los investigadores determinaron además que Sancho fue el que le dijo a Arrieta que viajara a Tailandia para las Fiestas de la Luna Llena y que fue el colombiano el que le pagó los gastos al español e incluso le permitió usar su tarjeta de crédito. Además, Arrieta había abierto un restaurante en España para Sancho.
Teniendo en cuenta todos los hallazgos, las autoridades tailandesas creen que el dinero y las propiedades pudieron ser las causantes de la muerte del colombiano, pero todo sigue siendo materia de investigación.
Un kayac habría sido utilizado por Sancho Bronchalo para deslizar las partes del cuerpo del colombiano hacia el mar
Recolectores de basura encontraron en un depósito de Koh Phangan algunas partes del colombiano Edwin Arrieta. Sin embargo, el resto de su cuerpo estaría en el mar de Koh Phangan.
Justamente, las autoridades tailandesas encontraron este sábado 5 de agosto un kayac a unos 300 metros del hotel en donde tuvo lugar el asesinato y se cree que aquel bote habría sido utilizado para desplazar el cuerpo del colombiano hacia el mar.
Dos mujeres identificadas como Tuk y Akanda, propietarias del kayak, le dijeron a la Policía que alrededor de las 9 de la noche del martes el español llegó hasta el local que ellas tienen para alquilarlo. Al principio le dijeron que no porque sería peligroso utilizarlo a esa hora, pero el hombre insistió y ofreció 1.000 dólares para comprarlo, así que las mujeres aceptaron.
“Soy culpable, pero era su rehén”: afirma el español que presuntamente mató a Arrieta Arteaga
El español reconoció ante las autoridades de Tailandia que sí cometió el asesinato, pero que lo hizo porque se sentía rehén del cirujano colombiano. “Soy culpable, pero yo era el rehén de Edwin. Me tenía como rehén. Era una jaula de cristal, pero era una jaula. Me hizo destruir la relación con mi novia, me ha obligado a hacer cosas que nunca hubiera hecho”, dijo ante los abogados de oficio tailandeses y varios agentes de policía.
Al ser preguntado si se sintió forzado para declararse culpable, respondió: “No me sentí cómodo, pero tampoco forzado. Sentí que tampoco tenía ninguna otra opción. Me tomaron pruebas de ADN y eso es todo. Eso es todo”.
Así mismo, acusó al colombiano de estar obsesionado con él. “Él estaba obsesionado conmigo. Me engañó, me hizo creer que lo que quería era hacer negocios conmigo, meter dinero en la empresa de la que soy socio. Que hiciéramos cosas juntos, que fuéramos a México, Chile, Colombia, a abrir un restaurante. Pero era todo mentira. Lo único que quería era a mí, que fuera su novio”.
Ahora, el ciudadano español pasará a disposición judicial de la isla de Koh Samui.