En horas de la noche del pasado jueves 3 de agosto regresó al país el actual presidente de Ecopetrol, Ricardo Roa Barragán, quien fuera el exgerente de la campaña de Gustavo Petro. Aunque algunas personas aseguran que fue por orden del jefe de Estado, otros afirman que fue por voluntad propia. Lo cierto es que canceló su agenda en Houston, Texas (Estados Unidos), con el fin de poner la cara en la crisis que enfrenta el país y que llevó al presidente Petro a contratar al penalista Mauricio Pava para su eventual defensa.
“Recibo con dolor, a nivel personal, las informaciones sobre presuntas irregularidades en el desarrollo de la campaña presidencial en la Costa. Serán los jueces en sus diferentes competencias quienes definan jurídicamente lo que corresponda”, afirmó el presidente.
Tan solo 48 horas antes, Nicolás Petro Burgos, hijo mayor de Gustavo Petro, no había aceptado los cargos por enriquecimiento ilícito y lavado de activos por los que fue capturado el pasado sábado 29 de julio por la Fiscalía.
Sin embargo, parecía que la defensa de Petro Burgos iba a seguir alegando su inocencia. También intentó que los fiscales de su caso y al fiscal general, Francisco Barbosa, se apartaran de la investigación, argumentando que el enfrentamiento entre Barbosa y el presidente podría afectar el debido proceso.
No obstante, luego de completar cinco días detenido en uno de los calabozos del búnker de la Fiscalía y después de reunirse con su defensa, el hijo del presidente pasó de acusado a testigo estrella del ente acusador, en los hechos que pusieron en tela de juicio la legalidad de algunos de los millonarios recursos usados durante la campaña que posteriormente llevó a su Gustavo Petro a la Presidencia de la República
A raíz de este escándalo, Nicolás Petro Burgos ofreció entregar toda la evidencia documental y técnica para corroborar de que parte de los recursos, recibidos por él, de por lo menos cuatro fuentes oscuras, se usó para financiar la campaña del Pacto Histórico en la costa Caribe.
Así mismo el diario El Tiempo pudo establecer que al parecer hay otra investigación en curso por el presunto ingreso de dinero de un clan del narcotráfico.
En la oferta que hizo Petro Burgos al colaborar con la Fiscalía, manifestó que estaba libre de presiones, desatando otra crisis en el alto gobierno a pocos días de que su padre complete su primer año como jefe de Estado, con una coalición casi desintegrada y una agenda legislativa en serias dificultades.
Otra de las aristas de esta nueva polémica es que se da a pocos meses de las elecciones regionales en las que el partido de gobierno al parecer está bajando su aceptación en zonas clave. Esta situación se torna más delicada si se tiene en cuenta que algunas renombradas figuras del Pacto Histórico, aparecen en los dos organigramas revelados en la audiencia por el fiscal Mario Burgos.
De ser reales los señalamientos, los cuales deben estar sustentados con pruebas, se convertirían en una clara violación de los topes autorizados en las campañas, que es algo que se penaliza con cárcel.
La Fiscalía por su parte quebró el argumento de la defensa de Nicolás Petro en el momento que exhibió la evidencia de la recepción de por lo menos mil millones de pesos que fueron usados con el objetivo de comprar mansiones, carros de alta gama, joyas y otros lujos personales.
Organigramas expuestos por la Fiscalía
Uno de los organigramas exhibidos durante las audiencias, evidenció que aparecían personas relacionadas con Nicolás Petro y con su exesposa Day Vásquez; entre ellas está, Verónica Alcocer (la primera dama); el exministro Alfonso Prada, hoy embajador en Francia; y Mauricio Lizcano, exjefe del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre) y hoy ministro de las TIC, además de Armando Benedetti, de quien se conocieron unos audios en los que manifestaba que había conseguido 15.000 millones de pesos para la campaña en la Costa, que tampoco aparecen reportados.
Sin embargo, el segundo organigrama es aún más comprometedor ya que en el aparecen las personas que, según la Fiscalía, participaron en un entramado para entregar dineros, moverlos en tulas y ocultarlos adquiriendo bienes a nombre de terceros.
En esa línea están Camilo Burgos Soto, primo de Nicolás Petro; Germán Londoño, un amigo; y también un hombre identificado como Raymond Montaño.
Según la Fiscalía, todas las personas que aparecen en los organigramas serán citados para cumplir con la diligencia de interrogatorio la próxima semana y no se descarta que haya nuevas capturas.