Lo que empezó como un vistazo por las famosas aplicaciones de préstamo con “intereses bajos” se habría convertido en un dolor de cabaza para un bogotano que, luego de recibir una consignación por 650 mil pesos que jamás solicitó, se convirtió en blanco de amenazas, al igual que su esposa y su hijo.
Liliana Zambrano, de la dirección jurídica de legaltech y experta en seguridad, le dijo a Infobae Colombia que “esta es una nueva modalidad que están utilizando. Le dicen a una persona que le consignaron y con sus datos básicos a muchos les están haciendo instalar aplicaciones y, al hacerlo, logran secuestrar su información. Se convierte en un ir y venir porque la persona lo que haces es, primero, tratar de resolver su situación financiera devolviendo la plata, pero, después lo que hacen es un hackeo de su información o de su cuenta bancaria”.
A mediados de julio, cuando mataba el tiempo en casa, le “empezaron a salir estas aplicaciones” a manera de sugerencia en sus redes sociales. “Así que revisé una, pero después de ocho días empezó el tema, donde me aparece una plata en mi cuenta Nequi”, denunció, en entrevista para el matutino de Arriba Bogotá.
Dinero que, luego de unos días, empezarían a cobrarle los delincuentes que realizaron la transferencia. Le dijeron: “revise su Nequi porque en su cuenta aparece una plata y usted tiene que pagárnosla”.
Entonces, él intento explicarles que no había solicitado ningún préstamo, pero el cobrador insistía en que no solo debía pagar los 650 mil pesos, sino también una cantidad igual en intereses. Así que regresó el dinero de inmediato, pero de poco sirvió.
Siguieron llegándole mensajes, cada vez en un tono más agresivo, y llamadas de un hombre que, según su relato para el medio citado, tenía acento mexicano. Así que, no teniendo de otra, le dijo que el número por el que se comunicaba ya estaba reportado con la Policía y ellos le estaban realizando seguimiento.
Cambió su tarjeta Sim y cerró sus redes sociales, pero ya era demasiado tarde. Al devolver el supuesto préstamo le enviaron un link que, luego de abrir, les habría permitido a los delincuentes tener acceso a su información.
Obtuvieron el número de su esposa y de su hijo y empezaron a llamarlos, utilizando un lenguaje soez, para amenazarlos si no entregaban la cantidad de dinero indicada. Una que, con el tiempo, fue aumentando debido a que siguieron haciendo consignaciones.
Según dijo Zambrano a Infobae “desde hace más de dos semanas se vienen identificando estas aplicaciones, también conocidas como apps, que les están diciendo (a quienes necesitan prestamos): instálenla (nuestra app) y se da cuenta de la información. Entonces la persona lo que haces es instalar la app y cuando se da cuenta ya tiene un mardware en su teléfono”.
Una nueva modalidad de extorsión que estaría siendo utilizada por los famosos prestamistas gota a gota que, valiéndose de la tecnología móvil, han logrado llegar a quienes ni siquiera realizan un préstamo de manera formal. Tan solo con un clic las personas estarían entrando en su entramado y, de inmediato, quedarían vinculadas al igual que sus familias.
De ahí que, la recomendación de parte de las autoridades es no descargar ninguna aplicación si no la conocen, sobre todo si de dinero o préstamos se trata, y no tiene una buena calificación o referencias de usuarios que la hayan utilizado en el pasado. Si bien los préstamos en bancos y entidades oficiales exigen atravesar un mayor número de filtros, se encuentran reguladas y es un hecho que no recurren a técnicas de intimidación como las de los gota a gota.