La Procuraduría General de la Nación dio a conocer que inició una investigación penal en contra del gerente de la Lotería del Cauca, Milciades Vergara Balanta por, presuntamente, estar relacionado en irregularidades en algunos contratos que se celebraron en la entidad. Los vínculos en los que se habrían registrado las inconsistencias fueron en la compra de artículos en cuero que se le entregaron a algunos distribuidores y clientes.
Específicamente, las irregularidades se detectaron en la etapa precontractual de los contratos 133 y 134 de 2022. En esos vínculos habrían estado involucrados, además del gerente de la entidad, el jefe de la Oficina Comercial, Óscar Enrique Hurtado y la jefe de la Oficina Jurídica y Talento Humano, Nelly Mercedes Becerra Gómez.
La Procuraduría señaló que el primero de los cargos se les sindicó a los acusados por, presuntamente, haber aprobado dichos contratos en primera estancia además de suscribir los estudios previos para la celebración de estos. Aquel proceso habría conllevado a que se estableciera la modalidad de contratación directa en donde se dividieron el mismo objetivo; eso quiere decir que los dos vínculos ostentaban el mismo trabajo.
Además, ambos contratos sumaban un valor superior al que inicialmente era permitido en este tipo de vínculos. El segundo de los cargos que imputó la Procuraduría se basa en la presunta omisión de los funcionarios a la hora de plasmar las especificaciones pertinentes de los contratos en los estudios previos de los mismos, así como en los documentos en los que reposaban oficialmente.
Así mismo, el ministerio público acusó a los sindicados de no establecer la “cuantía de los negocios jurídicos de manera motivada y conforme el referenciamiento y estudio de mercado”. Los funcionarios debieron haber suscrito un único bilateral después de adelantar una investigación privada, bajo la cual se reconociera la libre concurrencia e igualdad de los entes relacionados con dicho vínculo.
La acción de los funcionarios tuvo que haber incurrido en normalidad, pero sin establecer un trato discriminatorio al “oferente escogido directamente”, teniendo en cuenta además la variedad de proponentes que existían detrás de los contratos “implicando la invitación privada y la respectiva mejora en los precios ofrecidos”.
De esta manera, la Procuraduría enfatizó en que tanto Milciades Vergara Balanta como Óscar Enrique Hurtado Zapata y Nelly Mercedes Becerra Gómez desconocieron los principios previamente establecidos de la función administrativa que regulan la “modalidad de selección por invitación privada”. Estos puntos están plasmados en el Acuerdo 007 de 2020 del Manual de Contratación de la Lotería del Cauca, dentro del cual se enfatiza en aspectos tales como la transparencia, economía e imparcialidad.
Las faltas en las que incurrieron los funcionarios implicados fueron reconocidas, provisionalmente, como gravísimas cometidas a título de dolo, teniendo en cuenta que, según señaló el Ministerio Público, los sindicados actuaron de manera consciente. Esto incide en que se les acuse por la “ilicitud sustancial de su comportamiento”.
A pesar de las acusaciones, la Procuraduría indicó que los sindicados están en plenitud de sus derechos para presentar los recursos que consideren necesarios para justificar su defensa: “Los sujetos procesales podrán presentar descargos y/o solicitar o aportar las pruebas que consideren necesarias para su defensa. En cumplimiento de la separación de roles, el expediente se remitirá al despacho de juzgamiento competente para que adelante el juicio”.
El caso de los funcionarios de la Lotería del Cauca podría resolverse en las próximas semanas y, de ser hallados responsables y declarados culpables de los delitos que se les acusan, los implicados podrían ser enviados a un centro penitenciario de la región. La Procuraduría General de la Nación aún continúa adelantando las investigaciones pertinentes.