Jóvenes que no sienten seguridad de ahorrar para la compra vivienda por los recientes cambios en las políticas de subsidios o mujeres que, recientemente, perdieron el empleo y que todavía no encuentran trabajo, lo que las obliga a suspender los abonos del ahorro programado. Estos son solo algunas de las historias que mes a mes llegan con más frecuencia a muchas cooperativas financieras a nivel nacional.
Un estudio hecho a 2.743 personas (1.588 mujeres y 1.155 hombres) de nueve departamentos del país, reveló que los principales motivos por los cuales declinan ofertas de ahorro son falta de recursos (36,5%), incertidumbre relacionada con circunstancias económicas y políticas (29%) y la intención de invertir recursos que antes se destinaban para ahorro, bien sea porque ya fueron invertidos o se tenga una destinación futura o decisión ya tomada.
El análisis por departamentos muestra que la incertidumbre es la principal respuesta en el Valle del Cauca (91,3%) y en Cundinamarca (51,9%). Entretanto, en Quindío y Casanare la intención de invertir recursos es la respuesta más frecuente, con un 67,6% y un 56,5%, respectivamente. Finalmente, la falta de recursos fue la principal respuesta en Risaralda (81,7%), Meta (71,4%) y Boyacá (57,5%). En zonas como Antioquia y Bogotá, las tres principales razones tienen porcentajes cercanos al promedio.
Al agrupar los motivos de rechazo de ofertas por género, encontraron que entre los hombres predomina la incertidumbre; mientras que, entre las mujeres predomina la ausencia de recursos para ahorrar. Esta diferencia se hace notoria en especial en el grupo de usuarios que expresan de manera abierta que desean retirar sus ahorros, dentro del cual las mujeres representan el 64,1%.
“Puede comprenderse, pues, que el menor acceso al mercado laboral y sus menores ingresos impulsen a las mujeres a limitar su ahorro por falta de recursos; para los hombres, la percepción de inestabilidad en el mercado laboral y la obtención de menores ingresos los lleva a darle mayor peso a la incertidumbre”, explicó el, gerente de mercadeo de Confiar, Andrés Velásquez.
Al contrastar la composición de los motivos de rechazo de asalariados e independientes informales, aparecen comportamientos sustancialmente diferentes en aspectos tales como:
- Para los independientes informales, la principal causa de desistimiento es la falta de recursos. Para los salariados es la incertidumbre. En el caso de los independientes informales, las concentraciones son sobresalientes entre quienes manifiestan que, además de no tener recursos, tienen proyectos de inversión.
- Ante escenarios de incertidumbre y precariedad, los asalariados limitan su ahorro por la incertidumbre, mientras que los independientes informales lo limitan por la falta de recursos.
Por último, cabe señalar que el interés del público por los productos de ahorro para vivienda se ve muy afectado por la percepción de precariedad e incertidumbre relacionada con el panorama económico actual. Esta situación parece llevar a las personas a desistir de los planes de adquirir vivienda y, más bien, pensar en otras maneras de utilizar sus ahorros; lo que lleva a que el 14% de los encuestados con este tipo de producto manifiesten el deseo de retirar los saldos.
Cinco razones por las cuales las personas deberían ahorrar
Es cierto que hay una atmósfera de tensión económica, pero esto debe convertirse en una oportunidad para cuidar el recurso y distribuirlo de la mejor manera. Por eso es necesario conocer cinco razones por las cuales las personas deberían ahorrar. Son las siguientes:
- Si la persona tiene planes de invertir el dinero, debe asegurarse que sea en un negocio que previamente conozca, así minimiza el riesgo de perder dinero. Los negocios requieren de un capital que los respalde mientras logran el punto de equilibrio.
- Es fundamental contar con dinero disponible para afrontar cualquier imprevisto como pérdida de empleo, alza en alimentos, problemas de salud o aprovechar una oportunidad. Lo ideal es tener este dinero en una entidad financiera para no correr el riesgo de malgastarlo.
- Cuando la economía es inestable se debe ir un paso adelante y darle al presupuesto un manejo responsable realizando consumos austeros para poder generar ahorros.
- A pesar de las dificultades económicas, hay consumos que hacen parte de las costumbres de las personas como las celebraciones de fechas especiales y reuniones sociales. Priorizar la inversión del dinero y hacer regalos valiosos más no costosos es una buena alternativa para incrementar el ahorro.
- El ahorro también debe posibilitar el consumo de productos que mejoren la calidad de vida, invertir en autocuidado.