A diez días de que Gustavo Petro cumpla su primer año como presidente de Colombia, el balance de su gestión deja más preguntas que certezas. Muchas de las reformas propuestas en lo corrido del ciclo han encontrado una fuerte resistencia en el Congreso, y los escándalos que salpican a varios funcionarios y hasta familiares suyos han representado golpes a su credibilidad. Incluso su cambio de enfoque en la lucha contra el narcotráfico, apoyado por los Estados Unidos en un principio, no ha encontrado la recepción favorable que el mandatario esperaba.
Aún está fresco el recuerdo de lo ocurrido el 3 de febrero y el 26 de abril, cuando Petro anunció la salida de diez miembros de su gabinete de ministros (tres en febrero y siete en abril), a los que se suma la reciente renuncia de Irene Vélez de su cargo en el Ministerio de Minas y Energía. En días recientes se viene especulando con nuevos cambios en los ministerios, y suenan los nombres del canciller Álvaro Leyva; el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, y el ministro de Defensa, Iván Velásquez. De acuerdo con Semana, podría haber incluso más nombres involucrados.
Hasta ahora, uno de los que se ha mantenido en su cargo desde la posesión de Petro es Néstor Osuna, actual ministro de Justicia. El que fuera conjuez en la Corte Constitucional y magistrado del Consejo Superior de la Judicatura, se refirió ante las preguntas de los medios de comunicación en rueda de prensa sobre estos rumores, a los que se refirió de manera jocosa:
“Todos los días está en juego cualquier cargo, pero ya se vuelve un poco divertido eso del remezón ministerial. A lo mejor, pues algún día tendrán que prescindir de este ministro de Justicia, pero yo estoy muy contento”
Y todo indica que Gustavo Petro también está contento con él, pues en su primer año el ministro presentó para debate en el Congreso una reforma al Código Penal, orientada a combatir el hacinamiento en las cárceles colombianas. Esto no dejó de tener cierta controversia, pues para ello se propone la eliminación de ciertos delitos como la injuria, la calumnia, la inasistencia alimentaria, la supresión, alteración o suposición del estado civil; y la emisión y transferencia ilegal de cheque.
Bajo la gestión de Osuna también se presentó el proyecto de ley de sometimiento a la justicia para bandas criminales. Aunque el mismo fue rechazado por el congreso, el ministro señaló que iba a volver a lanzar el proyecto el 20 de julio. Pero días antes de que esto sucediera, anunció que en vez de volver a presentar el proyecto en el legislativo, optaría por prorrogar la actual ley de justicia y paz.
Petro le recordó a Margarita Cabello que la Convención Americana sobre de Derechos Humanos es una ley de la República
Mientras el ejecutivo sigue sin satisfacer las expectativas de Gustavo Petro y el legislativo mantiene filas cerradas contra cada proyecto de ley que se pone en discusión, el mandatario continúa enfrentado con el fiscal general Francisco Barbosa, y más reciente con la procuradora Margarita Cabello. Debido a las declaraciones que esta dio en Blu Radio donde aseguró que a Petro “no le gustan las leyes colombianas”, el mandatario respondió en su cuenta de Twitter:
En Twitter, el presidente le recordó a la procuradora que la Convención Americana sobre Derechos Humanos no es un simple tratado suscrito por el Estado colombiano, sino que hace parte del bloque de constitucionalidad y es una ley de la República:
“Con todo el respeto que me merece la procuradora pero debo decirle que la Convención Americana no solo es un tratado firmado por Colombia sino que también es una ley de la República y hace parte de nuestro bloque de constitucionalidad”