En medio del escándalo nacional por el robo de cerca de $80.000 millones de Ecopetrol la Fiscalía reveló que una de las empresas encargadas de comercializar el crudo hurtado existía solo en los papeles y su diercción era una tienda de barrio en la que venían pan.
De acuerdo con el ente investigador la compañía Niman Commerce, cuyo único representante legal era Hernando Silva Bickenbach, aparentaba ser una gran multinacional con decenas de asesores y expertos e ingenieros de petróleo, que se encargaban de facilitar los procesos de transporte y distribución de crudo.
Sin embargo la supuesta empresa desapareció de la noche a la mañana y cuando los investigadores fueron a corroborar la dirección que registraron en los documentos legales, se toparon con una panadería en un barrio de Bogotá.
Las autoridades indicaron que la ficticia empresa Niman Commerce y la compañía CI Exportecnical, recibían el petróleo de contrabando que había sido robado del oleoducto de Caño Limón-Coveñas, lo mezclaban con crudo legal y lo redistribuían de forma legal por medio de Gunvor otra empresa que contaba con los permisos pertinentes del ministerio de Minas y energía.
Por lo anterior fueron vinculados al proceso Hernando Silva Bickenbach y Luis Carlos Gandur, quienes estaban relacionados con la empresa CI Exportcnical. Además también están ligadas a la investigación seis empresas más dedicadas a la importación de crudo, las cuales tenían sobre el papel un solo propietario, por lo que investigan si eran ficticias al igual que Niman Commerce, con sede en una panadería.
La Fiscalía también tiene en la mira a otros 20 empresarios, de los cuales no revelaron nombres, quienes estarían detrás del entramado criminal para desfalcar los yacimientos de Ecopetrol y las finanzas del Estado. En el proceso, la empresa petrolera y la Dian se declararon víctimas de las acciones criminales.
Así se robaban el petróleo
El millonario robo de petróleo fue revelado tras una mega investigación interinstitucional en la que participaron la Dijín, la Fiscalía, inteligencia de la Armada y efectivos de la Unidad de información y Análisis Financiero de Colombia (Uiaf), entidades que identificaron el robo del crudo era a través del ‘barbacheo’, una teçnica que consistía en la instalación de válvulas en las redes de los oleoductos del país.
De acuerdo con el jefe de incautaciones de la Dijín, Juan Guillermo Uribe, los delincuentes instalaban las válvulas en los viaductos para conectarse al suministro de petróleo y desviar el flujo de crudo hasta camiones cisterna con capacidad de 12.000 galones.
Cuando los saqueadores del petróleo tenían los carrotanques cargados, llevaban el hidrocarburo hasta las empresas encargadas de recibirlo, entre las que estaban Niman Commerce y la compañía CI Exportecnical. Allí procesaban el crudo para combinarlo con petróleo lícito y posteriormente comercializarlo a través de Gunvor y otras refinerías legalmente constituidas.
En diálogo con Blu Radio, el oficial de la Dijín dijo que dentro del campo petrolífero de Ecopetrol: “Había personas encargadas de apoderarse del hidrocarburo (...) Se pudo establecer que el ELN tenía un enlace con las personas que se apoderaban del hidrocarburo en Caño Limón-Coveñas”.
Respecto al millonario desfalco, el presidente Gustavo Petro expresó a través de su cuenta de Twitter: “El robo de petróleo a Ecopetrol solo en el caso investigado por Dijin, Uiaf, fiscalia e inteligencia de la Armada puede alcanzar la cifra de 360.000 millones de pesos”.
En una publicación previa el jefe de Estado indicó que: “Esta investigación de la Dijín muestra uno de los mayores robos al estado colombiano. Se robaron cerca de 80 millones de dólares en petróleo y los delincuentes eran “gente de bien” de los sectores más pudientes del país. Debe investigarse si el robo contó con apoyos al interior de Ecopetrol”