Un grupo de ciudadanos se reunió a las afueras de la casa del alcalde de Barranquilla, Jaime Pumarejo, con ollas en mano, para mostrar su inconformidad por las obras de canalización del arroyo Hospital.
Los hechos ocurrieron en la noche del martes 25 de julio y los protestantes lo hicieron para llamar la atención sobre los problemas que desde hace tres años enfrentan los habitantes del barrio Rebolo, por lo que exigieron soluciones por parte de la administración Distrital.
Según las denuncias de los ciudadanos, la canalización se construyó por encima del nivel de las viviendas, lo que genera inundaciones, daños a la infraestructura y graves afectaciones sanitarias.
Por medio de una sentencia se había ordenado el levantamiento de las casas de la zona por los constructores y la Alcaldía, sin embargo las familias víctimas de las obras fueron informadas en los últimos días que serán expropiadas vía administrativa.
Así como lo explicó la líder social y habitante del sector Arlels Arrieta “este rebosamiento de agua lo que hace es inundar las viviendas. El distrito había quedado en hacer un levantamiento de las viviendas por esa mala afectación y en este momento hay una sentencia de la Corte, pero eso no se ha subsanado. Se hicieron algunos levantamientos de vivienda, pero eso todavía no está subsanado”.
Este ‘cacerolazo’ es la segunda protesta que se lleva a cabo a las afueras de la casa del alcalde en menos de una semana, pues no se ha llegado a ningún acuerdo con los funcionarios del Distrito.
De esta manera, los líderes del barrio Rebolo por medio de una carta exigieron la realización de una mesa de trabajo en el sector por parte de las autoridades distritales.
Según la Alcaldía, en este proyecto de canalización de arroyos “para la protección de taludes se utiliza tablestacas de acero, también se realiza la reubicación de redes de acueducto y alcantarillado, se ejecutará además la reconstrucción del pavimento en concreto rígido, bordillos y andenes en loseta decorativa, paraderos de buses, subterranización de redes eléctricas de baja tensión, postería metálica con alumbrado Led, bancos de ductos de telecomunicaciones, bancas y arborización”.
Militares se tomaron barrios de Barranquilla por plan pistola contra comerciantes por parte de Los Costeños
La banda delincuencial ‘Los Costeños’ tiene en alerta a los comerciantes de Barranquilla, en los últimos días a través de redes sociales a los habitantes de la capital del Atlántico les han llegado presuntos mensajes de la organización delincuencial asegurando que iniciarán un ‘plan pistola’ en la región.
La razón de estas amenazas es asegurar que los comerciantes paguen las extorsiones, actividad delincuencial que sí se le ha comprobado a ‘Los Costeños’ en la ciudad. Precisamente desde la Unión Nacional de Comerciantes (Undeco) reportaron que en los barrios Chiquinquirá, San Roque y en algunos sectores aledaños se han evidenciado hostigamientos por parte de los criminales al gremio comercial.
Jaime Pumarejo reveló que extorsiones a gasolineras provenían de las cárceles e hizo polémica sugerencia
Ante el anuncio de un posible cese de actividades en las estaciones de servicio de Barranquilla por los recientes casos de extorsión que ya dejaron un muerto y cierres temporales de varios puntos, el alcalde de la ciudad, Jaime Pumarejo, anunció que ya se identificaron los autores de estos hechos.
A través de su cuenta de Twitter, el burgomaestre de la capital del Atlántico informó: “Autoridades identificaron a autores de extorsiones a estaciones de gasolina y a Siglo 21; operativos avanzan, la Policía de Barranquilla informará. La orden vino desde dos cárceles y delincuentes serán aislados. Grave que algunos guardianes del Inpec sean cómplices”.
Luego, en la misma red, se volvió a quejar del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec): “Si el Inpec no puede vigilar a presos peligrosos, o asegurar el correcto desempeño de sus propios funcionarios, sugiero liquiden la entidad hoy mismo”.
Por último escribió: “Las falencias advertidas en el sistema de justicia continúan y deben corregirse YA. El Congreso debe debatir y legislar con urgencia para darle herramientas a la justicia, Fiscalía y Policía. Insisto: Quien use un arma para cometer un delito debe ir preso sin beneficios”.