Consternados se encuentran los más de 7.000 habitantes del municipio de Coromoro, ubicado en el departamento de Santander y que forma parte de la provincia de Guanentá, con lo ocurrido con un menor de 7 meses de nacido.
Al centro de salud del corregimiento Cincelada fue llevado el menor para que fuera atendido de urgencia por el médico rural, sin embargo, el niño llegó sin signos vitales.
Según confirmó el gerente del hospital de Coromoro a Blu Radio, el cuerpo del menor quedó en custodia de las autoridades tras activarse la ruta de protección por posible maltrato infantil.
“Al niño se le hicieron las maniobras de reanimación, pero el niño llegó muerto. El bebé había tenido unas posibles lesiones que llevan a que pudo ser maltrato infantil hace dos meses atrás. Esa vez fue atendido en Charalá, fue una fractura de fémur y eso en un niño es complejo (…) Se sospecha maltrato y por eso se activó la ruta, se llamó a Policía de Infancia, se hizo la custodia del cuerpo, este proceso está en curso con los familiares, al centro de salud no lo llevaron los papás”, indicó Carlos Quintero, gerente del hospital de Coromoro.
Según el reporte oficial de la Policía, obtenido por Blu Radio, los papás del bebé son dos jóvenes de 16 y 19 años. El reporte también indica que el menor fue llevado por la tía al centro de salud.
La familiar del bebé dijo a dicho medio que quiere saber cuál fue la razón de la muerte del niño.
“Yo quiero saber cómo fue la muerte y la razón. Que se aclaren las cosas porque tengo nostalgia al saber que no pude salvarle la vida a mi ser querido”, dijo sobre la muerte del bebé, cuyo cuerpo permanece en Medicina Legal.
Por el momento, la Policía de Santander no ha entregado respuesta alguna a través de la oficina de comunicaciones sobre este caso.
Otro caso de maltrato infantil este año en Santander
El hecho sucedió en febrero de 2023. Una niña de 4 años falleció en Girón, Santander, por presunto maltrato infantil. La administración municipal en su momento les solicitó a las autoridades competentes y a la Fiscalía hacer la investigación necesaria para esclarecer el suceso.
La niña residía con su familia, de nacionalidad venezolana, en el barrio Balcones de Girón. De acuerdo con el reporte de las autoridades, el 20 de febrero la menor de edad presentó problemas de salud y fue llevada de urgencias por su madre hasta la Clínica de ese municipio.
Sin embargo, cuando la pequeña ingresó al área de urgencias ya era demasiado tarde; estaba sin signos vitales y los médicos no pudieron hacer nada por ella. No obstante, los médicos evidenciaron que la pequeña presentaba síntomas de desnutrición y otras señales que estarían relacionados con un presunto caso de maltrato infantil, por lo cual la situación fue reportada ante las autoridades.
“La niña de cuatro años, hija de venezolanos, ingresó a la clínica en un evidente estado de deshidratación. Según el reporte de la Clínica, ella llega sin signos vitales y los médicos reportaron un aparente cuadro de desnutrición crónica”, explicó a medios Javier Acevedo, alcalde de Girón.
La madre de la niña habría dicho a las autoridades que horas antes le habrían suministrado un medicamento para tratar de controlarle la fiebre, sin embargo, la crisis de salud empeoró.
“Evidentemente, está en una situación de desnutrición crónica, también con unas laceraciones en la piel, y al preguntarle a la madre dice que estaba enferma, y que le dieron algo para la fiebre, pero cuando la llevaron ya estaba muerta”, agregó en su momento el mandatario local.