En agosto entra en vigencia el cese al fuego entre el Gobierno nacional y el Ejército Nacional de Liberación (ELN). Este será un escenario bilateral, nacional y temporal y se pactó en el tercer ciclo de diálogos con esta guerrilla en La Habana (Cuba).
En las últimas horas, el máximo cabecilla del ELN, alias Antonio García publicó una columna de opinión que compartió en redes sociales llamada ‘Interrogantes por resolverse’, en la cual citó algunos puntos que considera aún no se han definido de cara al inicio del cese al fuego bilateral.
“La ausencia de un mecanismo internacional concreto y real para garantizar el financiamiento de los combatientes del ELN, durante el cese al fuego, interroga la posibilidad de acuerdos futuros, pues si ahora no es posible cubrir los gastos de alimentación, vestido, salud y condiciones básicas para unas tropas en cese el fuego, menos habrá voluntad para acuerdos mayores”, señaló García.
El cabecilla del ELN mencionó que en algunas zonas del país aún se presentan operaciones del Ejército Nacional y otros grupos armados, las cuales pondrían en riesgo el cese al fuego, por lo que afirmó que espera que estas situaciones se resuelvan antes de que entre en vigencia el cese.
“Continúan las operaciones paramilitares en coordinación con las Fuerzas Militares en varias regiones del país: Chocó, Bajo Cauca antioqueño, nordeste de Antioquia y sur de Bolívar, entre otras, como lo hemos señalado de manera reiterada, hace parte de una estrategia de Estado que tiene como propósito sembrar el terror en las comunidades”, concluyó García.
Decreto del cese al fuego
El jueves 6 de julio, el presidente Petro firmó la ley que ordena cese al fuego bilateral con el ELN y que estará vigente entre el 3 de agosto de 2023 y el 29 de enero de 2024. Esta medida podrá ser prorrogada según la valoración que realice la Mesa de Diálogos de Paz frente a los informes que presente el Mecanismo de Monitoreo y Verificación.
El cese al fuego tendrá como objetivo mejorar la situación humanitaria de las poblaciones y de los territorios, con el propósito de que “la población civil pueda ejercer sus derechos y libertades, con énfasis en los más vulnerables, entre ellos, los liderazgos sociales y ambientales, pueblos étnicos, mujeres, personas defensoras de derechos humanos y los menores de edad”.
Mediante la norma, el jefe de Estado ordenó la suspensión de operaciones militares y operativos policiales ofensivos, “a partir de las 00:00 horas del 6 de julio de 2023, en contra de los integrantes del Eln que participen en el proceso de paz y se encuentren dentro de los procedimientos para la ejecución del acuerdo del cese al fuego bilateral y temporal de carácter nacional y los protocolos correspondientes”.
Mecanismo de verificación
Se estableció que este será integrado por el Gobierno nacional; fuerza pública y Oficina del Alto Comisionado para la Paz, el ELN, la Conferencia Episcopal de Colombia y la Misión de Verificación de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Colombia.
El Gobierno ordenó que a través del Fondo de Programas Especiales para la Paz, o de otros fondos se disponga de los recursos necesarios para la implementación de los compromisos y las responsabilidades derivadas del decreto.
Pasos para la implementación del cese el fuego
- Actividades de pedagogía y la preparación para la puesta en marcha para el mecanismo de monitoreo y verificación.
- El 10 de julio de 2023 se hizo una reunión plenaria y presencial de la mesa de diálogo de paz para aprobar los protocolos elaborados durante ese período se continuarán desarrollando las actividades de pedagogía.
- El 3 de agosto de 2023 inicia la implementación del proceso del cese al fuego bilateral aplicando la totalidad de los protocolos y el completo funcionamiento del mecanismo de monitoreo y verificación en sus instancias.
- A partir de esa fecha se empiezan a contar 180 días de vigencia del proceso de alistamiento del cese, el cual tendrá ocasión de continuidad.
- Entre el 14 de agosto y el 4 de septiembre de 2023, en Venezuela se entregará un balance de los acuerdos.