Con base en información suministrada por el Servicio Geológico Colombiano (SGC), cerca de 500 municipios en todo el país son propensos a sufrir deslizamientos e inundaciones, debido a la construcción en terrenos con fallas geológicas, pero que, a su vez, pueden registrarse por la presencia continua de altas precipitaciones.
El 17 de julio, Cundinamarca sufrió una fuerte avalancha que afectó el municipio de Quetame, el cual dejó hasta la fecha un saldo de 26 personas fallecidas y tres desaparecidas, además de interrumpir el paso de la vía que conecta Bogotá con Villavicencio.
La atención de la emergencia en esta zona del departamento cundinamarqués sigue en manos del Servicio Geológico Colombiano para analizar, estudiar, mediar y comprender por qué se presentan dichos fenómenos naturales, lo cuales pueden tener una importante incidencia en la vida e integridad física de las personas y los seres sintientes que habitan dichos territorios.
Para dar mayor claridad a este panorama, el director del SGC Julio Fierro, explicó que en más de 500 municipios del país confluyen condiciones geológicas, geomorfológicas, climáticas y de uso inadecuado del suelo, que incide directamente con su ocurrencia. Por tal razón, precisó la importancia de que el ordenamiento del territorio se haga con base en la gestión de riesgo por geoamenazas.
Sobre la tragedia en Quetame, Fierro explicó que ese punto es una zona sísmica activa donde las consideraciones geológicas y geomorfológicas hacen que se presenten las condiciones para que se registren una inestabilidad en los terrenos.
“La noche del 17 de julio hubo una confluencia de factores como deslizamientos detonados posiblemente por lluvias”, añadió Fierro.
En una entrevista que sostuvo el director con Rtvc, Ferro explicó que es muy complejo contar con un sistema de alerta temprana para evitar que esos hechos se registren, puesto que son varios los municipios del país que pueden presentar esas problemáticas. Además, afirmó que otros más no cuentan con la instrumentación necesaria para generar una alerta temprana: “Sin embargo, tenemos que priorizar”.
Igualmente, Fierro agregó que desde la entidad se está trabajando con sistemas, no tan costoso, que tienen como fin prever “así sea con un tiempo corto” los diversos eventos de la naturaleza.
Consejos para evitar tragedias en Colombia
Debido a los efectos de los fenómenos de La Niña y El Niño, las altas lluvias y las fallas geológicas, son varias las zonas de Colombia que están en riesgo de inundaciones, deslizamientos, avalanchas, entre otros eventos de la naturaleza. Por tal razón, el Ideam, el Ministerio de Ambiente, la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) y otras entidades han indicado una serie de recomendaciones para que las personas puedan actuar antes, durante y después de una tragedia natural.
Según lo precisó el UNGRD, la diversidad de suelos, topografías y climas de Colombia hacen que el territorio sea susceptible a la ocurrencia de deslizamientos, sobre todo en la región Andina.
La entidad precisó que las comunidades que deben estar mayormente alertas a posibles deslizamientos, sobre todo en temporadas de altas precipitaciones, son aquellas que residen en zonas de pueden presentar desplazamientos de masas de tierra o rocas por una pendiente, en otras palabras, vecindarios rodeados de montañas o ubicadas sobre estas.
Además, la entidad añadió que las comunidades que habitan asentamientos cercanos a sistemas fluviales como ríos, lagunas y otros cuerpo de agua, están igualmente en una condición de alta vulnerabilidad.
Para evitar posibles estados de emergencia, la entidad resaltó algunas recomendaciones para garantizar el cuidado y la integridad física de las personas que habitan esas zonas del país:
- Cree con su familia un plan de emergencias.
- Informe oportunamente a las autoridades cualquier anomalía o cambios en las zonas de ladera.
- Asegurar muy bien los techos, las tejas y las láminas de zinc.
- Cuando se presenten lluvias intensas los pobladores deben salir de sus hogares y buscar un lugar seguro, que no estén en una zona de alta pendiente ni cerca a las orillas de los ríos y quebradas.
- Atienda los comunicados oficiales emitidos por las alcaldías, entidades oficiales y gobernaciones, frente a la situación real de los eventos que puedan ocurrir en esa zona.