Las vías principales que conectan a Bogotá con Villavicencio quedaron prácticamente inhabilitadas por la avalancha en el municipio de Quetame, Cundinamarca. El desastre causó una tragedia que dejó más de 26 muertos y cientos de familias afectadas, mientras las consecuencias del hecho se extienden a los sectores productivos que dependen de la carretera.
El batallón de Ingenieros Militares avanza en la movilización de dos estructuras metálicas modulares para construir puentes semipermanentes que permitan la movilidad del Meta hacia el centro del país. Ambos serán instalados en la Ruta Nacional 40 en el sector del peaje el Naranjal. Se espera que el primero quede habilitado el 31 de julio y el segundo el 12 de agosto.
Mientras tanto, los transportadores de alimentos e hidrocarburos, los principales sectores económicos del departamento del Meta, solo tienen dos rutas alternas que implican sobrecostos. Las cifras se cuentan en los miles de millones de pesos diarios.
Nidia Hernández, presidenta de la Federación Colombiana de Transportadores de Carga por Carretera (Colfecar), explicó que los camioneros pasan de tomar un trayecto que normalmente toma alrededor de tres horas, a uno alterno que toma 15 horas, cinco veces más, en el que tienen que ir hasta Tunja.
“El incremento en peajes en esta vía alterna es de 40%, pero en el tema de combustibles es de un 475%, lo cual obviamente va a impactar ciertamente los fletes”, señaló la presidenta de Colfecar. Agregó que la vía alterna también tiene interrupciones por deslizamientos, lo que implica una desconexión entre los territorios.
El trayecto entre Bogotá y Villavicencio por la vía normal tiene un flete para una tractomula de $3 millones de pesos, pero en la vía alterna ese costo alcanza los $5,5 millones, es decir que el impacto sería de $2.700 millones diarios de sobrecostos para el sector a causa de la emergencia. Durante las dos semanas que estaría inhabilitada la vía, la afectación llegaría a los $38.000 millones según el cálculo de Colfecar.
El efecto se podría sentir tanto en el centro del país como en las ciudades del Meta que podrían ver reflejado el sobrecosto en el precio de los productos como carne de res, cerdo y pollo, así como la leche, frutas y verduras, según señaló El Espectador. Una consecuencia que puede impactar las cifras de inflación que han ido a la baja durante el primer semestre de 2023.
Las personas que necesiten movilizarse entre las dos ciudades también verán afectados sus bolsillos mientras se normaliza la movilidad. José Yesid Rodríguez, presidente de la Asociación para el Desarrollo Integral del Transporte Terrestre (Aditt), explicó al diario citado que el costo del pasaje de bus intermunicipal pasó de $35.000 a $75.000 por la vía alterna del Sisga y hasta $120.000 si toma por Sogamoso.
Desde la Gobernación del Meta calculan que son $50.000 millones de pesos en pérdidas diarios que alcanzan casi la mitad del PIB de ese territorio. A lo que se suma la suspensión del Festival Internacional del Joropo, que se realiza en agosto, que podría alcanzar los $120.000 millones, según señaló El Espectador.
El gobernador de Cundinamarca, Nicolás García, señaló que las tareas avanzan en la búsqueda de las tres personas que continúan desaparecidas tras la avalancha en Quetame y la atención a las 200 familias damnificadas, mientras por otro lado se realiza la instalación de los puentes provisionales para reestablecer la vía. Anunció que se toman medidas provisionales y definitivas.
El mandatario departamental señaló que movilizó 5.600 millones de pesos para la atención de la emergencia. “Seguiremos enviando recursos, lo que requiera la comunidad para garantizar su vida y el restablecimiento de las condiciones de los municipios de Quetame, Guayabetal y también de Fosque y Gutiérrez”, anunció García Bustos.