Sobre las 11:15 p. m. del lunes 17 de julio, una avalancha cubrió de lodo la vereda El Naranjal, del municipio de Quetame, Cundinamarca. Según el más reciente reporte del gobernador de Cundinamarca, Nicolás García, y del Cuerpo de Bomberos del departamento, al menos 15 personas murieron y 14 más están desaparecidas. Los seis lesionados el los hechos son atendidos por personal médico, cinco en Cáqueza y uno en Villavicencio.
El paisaje se transformó por completo en cuestión de minutos. Casas, calles, vehículos y familias enteras quedaron entre el barro, “principalmente en el sector de El Naranjal”, en donde “se reportan varias viviendas que fueron arrasadas por las crecientes. Se está haciendo atención de varias personas lesionadas en los diferentes sitios”, de acuerdo con el delegado departamental de Bomberos, el capitán Álvaro Farfán.
La avenida torrencial, que habría ocurrido a raíz de las fuertes lluvias registradas en el piedemonte llanero, provocó el desbordamiento de cuatro quebradas que rodean y atraviesan el municipio.
“Por las fuertes precipitaciones en la zona se presenta una avenida torrencial que genera la afectación de varias viviendas y de un colegio que se encuentra en la zona”, precisó el capitán Farfán en entrevista para Caracol Radio.
Según el gobernador García, las personas halladas con vida fueron remitidas a puestos de salud y hospitales de la provincia y del departamento del Meta, en Villavicencio. “Desde el departamento de Cundinamarca y desde el municipio de Quetame se ha declarado la calamidad pública y la urgencia manifiesta para poder disponer de los recursos de manera inmediata, a través de la Unidad Departamental de Gestión del Riesgo y Desastres, para atender a las víctimas, a todas las familias damnificadas y, por supuesto, también al municipio en todas aquellas obras e inversiones que deban hacerse de manera inmediata para mitigar la tragedia”.
Los primeros videos de cómo habría quedado Quetame tras el paso de la avalancha muestran la desolación que supuso la avenida torrencial en el municipio. Las aguas, teñidas por el barro, se adueñaron del paisaje y movieron a su antojo camiones, tejados y fachadas, que los habitantes no logran diferenciar entre el lodo.
La magnitud de la emergencia fue tal que dos de las víctimas fatales fueron arrastradas por la corriente hasta Acacías, en el departamento del Meta, a unos 70 kilómetros de Quetame.
El presidente Gustavo Petro lamentó la noticia e insistió en la necesidad de ordenar las poblaciones alrededor del agua, aunque sin invadir su espacio, que va más allá de la rivera.
“La muerte que llega a Quetame, Cundinamarca, demuestra la imperiosa necesidad de ordenar el territorio alrededor del agua y liberar sus espacios en los Planes POT de los municipios. Alcaldes y alcaldesas deben priorizar este principio. Mi sentido pésame a las familias víctimas”, dijo.
Caos en la movilidad y vías deshabilitadas
Mientras los organismos de socorro y rescate intentan adentrarse entre la montaña para sacar del lodo a quienes permanecen desaparecidos desde la madrugada, la entrada al municipio, por la vía al Llano, se encuentra bloqueada por cuenta del material rocoso sobre la carretera.
Por su parte, el gobernador del Meta, Juan Guillermo Zuluaga, se pronunció en horas de la tarde de este 18 de julio para dar a conocer el estado del puente que se llevó la avenida torrencial.
“El reporte que nos entregan de la vía es de dos a tres semanas de cierre. Además del puente que se llevó la avalancha, hay dos más con afectaciones a sus estructuras. La @ANI_Colombia ya está en coordinación con ingenieros militares, para la instalación de dos puentes de 45 y 60 metros. Junto con el gobernador de Cundinamarca @nicolasgarciab hemos convocado un PMU para coordinar todas las acciones y planes de contingencia”, escribió en su cuenta de Twitter.
El director de la UNGRD, Olmedo López, confirmó que las comunidades afectadas permanecerán en un albergue liderado por la Alcaldía y la administración municipal. También serán respaldadas con subsidios de arriendo y se les entregará una suma única de 500.000 pesos. “Estas ayudas humanitarias vendrán acompañadas de un reasentamiento después de los estudios que realicemos con la comunidad para que la vereda Los Naranjos, El Naranjal, aquí en Quetame, Cundinamarca, la recordemos, pero que no sea poblada de nuevo”, afirmó.
“Continúa cierre total de vía por afectación en el sector del peaje Naranjal debido a avalanchas y crecientes súbitas de la quebrada del sector. Se desconoce tiempo de apertura, se requiere inspección y revisión con luz día. Siga recomendaciones del personal (sic)”, informaron desde la cuenta oficial de Twitter de la concesionaria Coviandina.
Desde el sur de Bogotá se han registrado monumentales trancones, de viajeros que se quedaron haciendo fila en la carretera que conduce al peaje del Naranjal. Conductores de camiones informaron que el puente habría desaparecido bajo el lodo en el sentido Villavicencio -Bogotá.
Llegar a Quetame o al centro del país desde el departamento del Meta, se ha convertido en todo un problema para los conductores. Incluyendo al personal de la Defensa Civil.
Fueron cuatro las quebradas desbordadas entre la noche del lunes y la madrugada del martes (18 de julio), afectando a más de 20 viviendas y un colegio. Las autoridades aprovechan al máximo la luz del día para continuar con la búsqueda y encontrar la mayor cantidad de personas desaparecidas antes de que regresen las lluvias o se ponga el sol. Una carrera contra el tiempo que tiene en vilo a varias familias.
Vías alternas al corredor Bogotá- Villavicencio, con paso intermitente
La entrada al municipio de Quetame, por la vía al Llano, se mantiene bloqueada por cuenta del material rocoso sobre la carretera, al tiempo que los organismos de socorro y rescate intentaban adentrarse en la montaña para sacar del lodo a quienes permanecen desaparecidos desde la madrugada de este martes 18 de julio.
Pasadas las 3:00 p. m., la Concesión Transversal del Sisga anunció el paso intermitente a un carril en el sector de Túneles, ubicado entre los municipios de Macanal y Santa María (Boyacá). “Se presenta paso controlado por los trabajos de remoción de los derrumbes que hay en la zona”, confirmó el Ministerio de Transporte.
Este corredor vial continúa presentando condiciones de riesgo y emergencia a causa de la ola invernal, por lo que las autoridades recomiendan a los usuarios que, en lo posible, transiten por esa zona únicamente para lo estrictamente necesario.
“Hay restricción para vehículos de carga superiores a configuración C3, 30 toneladas y 2,60 metros de ancho”, agregó.
El Ministerio de Transporte también confirmó que la transversal del Cusiana se encuentra transitable en los 118 km, con los siguientes puntos críticos: PR (Punto de Referencia) 79+100, PR 79+800 - paso a un carril, puente Nuevo - paso a un carril, PR 83+600 - paso a un carril, PR 85+100, PR 87+000, PR 105+900 – paso a un carril, PR 114+600.
“En la zona se cuenta con personal y maquinaria permanente, con el fin de garantizar una movilidad segura. Actualmente, pueden transitar vehículos de hasta 52 toneladas, sin restricción de horario. Se cuenta con tres controles de tráfico en la transversal”, explicó.