David Murcia Guzmán, antiguo accionista mayoritario y representante legal de DMG, la empresa intervenida en 2008 por el gobierno de Álvaro Uribe por “captación masiva e ilegal de dinero”, aseguró en una entrevista virtual que envió al presidente Gustavo Petro una carta en la que solicita ser tenido en cuenta como mediador para restaurar el daño causado “no por David Murcia Guzmán, sino por la liquidación ilegal que hicieron”.
En sus declaraciones para el periodista Gonzalo Guillén, de La Nueva Prensa, Murcia recordó que la gente que salió afectada tras la liquidación de su empresa no fue víctima suya, sino del Gobierno.
“Las víctimas surgen a partir del cierre ilegal que hace el Gobierno. Ahí es que surgen una cantidad de personas afectadas por el Gobierno, no por David Murcia Guzmán. Entonces, las mismas personas reconocen que yo no fui el culpable del cierre ni del deterioro de su patrimonio, pues me apoyan a mí como persona. Entonces por eso hay tantas personas que solicitan mi libertad.
Luego agregó: “Se vieron movimientos de gente en las calles, en Bogotá y en todas las ciudades del país respaldándome a mí, no atacándome ni reclamándome nada y atacando al Gobierno. Ese es mi argumento y eso es lo que yo necesito que vea el Gobierno (de Petro) porque la gente me sigue viendo como su líder natural para poder ayudar con este conflicto que hay que no es conmigo; es entre el Gobierno y la gente”.
“Yo estoy ofreciendo ser un mediador para que se pueda causar el daño causado a toda esa gente, pero no por David Murcia Guzmán sino por esa liquidación ilegal que hicieron y porque se han cogido esos dineros y los han desaparecido”, aseveró.
Así mismo, aseguró que lo que busca no es su libertad, porque la libertad ya se la debieron haber otorgado “por Constitución”, ya que según dice le están violando el Artículo 29, “donde dice que una persona no puede ser juzgada dos veces por los mismos hechos”.
El antiguo empresario paga una condena de 30 años y ocho meses por los delitos de lavado de activos agravado y captación masiva e ilegal de dinero. Actualmente, está recluido en la cárcel de máxima seguridad La Tramacúa, en Valledupar.
Un venezolano pretendía revivir una pirámide estilo DMG: así operaba el estafador capturado en Colombia
Durante tres años Arnoldo Jesús Valera Rodríguez se escondió en Colombia aprovechando su doble nacionalidad para ocultarse de la justicia de Venezuela y a cientos de familias que entregaron sus ahorros con la ilusión de duplicarlos.
El venezolano de 32 años, de profesión economista, en el 2015 inició un sistema piramidal en el que prometía la multiplicación del dinero a la inversión en la ciudad de Puerto Ordaza, estado de Bolívar. Muchas personas creyeron, incluyendo integrantes de su familia, en esta oferta que aseguraba solucionar la grave crisis económica que enfrentaba en ese momento Venezuela.
De acuerdo con la revista Semana, Valera logró engañar a cerca de 50 personas, entre los que se encontraban varios familiares que confiaron en él con una fórmula igual al de la pirámide de DMG (David Murcía Guzmán). De esta manera, Arnoldo les ofrecía una rentabilidad del 10 por ciento con su poder de convencimiento.
Desde el 25 de mayo de 2017 lo denunciaron ante la Fiscalía General de la República 24 inversionistas que lo acusaron de estafa agravada y continuada, y apropiación indebida calificada. El abogado de la parte acusadora, Ezequiel Monsalve, señaló que el venezolano de 32 años trabajaba como brocker financiero o corredor de bolsa para la compra y venta de divisas en el mercado internacional.
Estas inversiones iniciaron en 2015 y para 2016 comenzaron las evasivas de respuestas a los inversionistas que esperaban por su pago. Otro de los abogados, Roberto Delgado, explicó que la estafa inicial fue de aproximadamente 151.264 dólares. Para 2017, la deuda ascendía a 262.456,54 dólares, sin cálculo de intereses devengados.
El extranjero fue capturado el 16 de febrero de 2023, un tribunal firmó un decreto sobre la privativa de libertad contra Arnoldo Valera, con fines de extradición, medida que no ha podido ser materializada. Es decir, sigue en “libertad”, a pesar de la inminente orden para que sea extraditado a Venezuela y responda por la estafa contra todas las personas afectadas.
Según la revista mencionada, Valera estuvo desde el año 2020 abandonó Venezuela rumbo a Colombia, para evadir su responsabilidad. Así, se convirtió en el estafador más buscado en el país vecino.
Personas estafadas
Una de las víctimas y principal denunciante es Enrique Barrios, cuñado de Arnoldo Valera, contó que a mediados de 2015 su familiar le comentó de un sistema de inversión en Colombia, le presentó un plan muy interesante con un beneficio del 10% y un fondo de reserva para suplir pérdida en el mercado. “La primera inversión fue bastante modesta. A los cuatro o cinco meses después de que pagó el beneficio se decide incrementar la inversión. Eso fue en 2016″, manifestó Barrios.
“Hubo personas que vendieron todo, confiando en que él iba a honrar esos pagos. Hubo personas que vendieron el auto para pagar tratamientos médicos, uno de esos inversionistas falleció”, relató Barrios.
Una mujer pensionada también cayó en este red, se trata de Doña Yasmín, quien según Semana tomó la decisión de entregarle sus ahorros de toda la vida y la liquidación a Arnoldo Jesús. Su confianza depositada se basó en la suerte de su propio esposo, pues ya había gozado de la rentabilidad del negocio, viendo como los cuatro mil dólares se habían duplicado en pocos meses. La pareja decidió doblar su apuesta y entregarle todo al joven venezolano.
Y es que si el mercado de las divisas fallaba, no había ningún problema, pues Valera se comprometía a devolverles el 75 % del dinero invertido. Todo esta promesa estaba soportada por la empresa HCC Holding, con sede en Bogotá. Sin embargo, no volvieron a saber nada de él a inicios de 2020, no respondía ni un mensaje y su teléfono celular siempre se encontraba apagado. De la empresa colombiana que lo respaldaba solamente habían registros en internet de extrañas direcciones en Bogotá, Singapur y Pekín.