Ejército destruyó un laboratorio de cocaína en importante sector turístico de Antioquia: generaba más de $2.000 millones al mes

La Cuarta Brigada desarrolló la operación en la población antioqueña de El Peñol

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La Cuarta Brigada del Ejército
La Cuarta Brigada del Ejército destruyó un laboratorio de cocaína que producía 400 kilos al mes. Crédito: Ejército

En el marco del plan de campaña Ayacucho, la Cuarta Brigada del ejército destruyó un laboratorio de cocaína en el Peñol (Antioquia), que tenía la capacidad de producir cerca de 400 kilos de clorhidrato de cocaína al mes y generar ingresos de 2.100 millones de pesos.

De acuerdo con las autoridades, el megalaboratorio de estupefacientes pertenecería a las actividades económicas ilícitas del grupo delincuencial organizado Los Mesa. Dicho grupo delincuencial integra la mesa de negociación con el Gobierno nacional en la búsqueda de la “paz total”.

“Este importante resultado tuvo lugar en el municipio El Peñol, localizado en el oriente del departamento de Antioquia; ahí, los uniformados hallaron ocho estructuras de madera que sostenían el laboratorio”, declaró la Cuarta Brigada del Ejército.

El Ejército indicó que durante el operativo se encontraron 12 hornos microondas, 2 gatos hidráulicos, 1 gusano y 2 marcianos, materiales esenciales en el proceso de destilación y secado de la pasta base de cocaína; además, los militares hallaron 150 kilos de clorhidrato de cocaína, 1.700 kilos de insumos sólidos y 3567 galones de insumos líquidos para la producción de alucinógenos.

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el laboratorio estaba ubicado en la población turística de El Peñol Crédito: Ejército

“Las tropas ingresaron sobre el área general del municipio de El Peñol y lograron ubicar el complejo, de 8 estructuras de madera, dedicado al procesamiento y producción de clorhidrato de cocaína”, aseveró el teniente coronel Manuel Antonio Espejo Jiménez, comandante del Grupo de Caballería Mecanizado Juan del Corral.

Los elementos incautados en la operación militar fueron puestos a disposición de unidades antinarcóticos de la Policía, que se encargó del proceso de judicialización.

Los Mesa en la “paz total”

Hace aproximadamente se instaló la primera mesa de negociación con los grupos delincuenciales del Valle de Aburrá en el marco del proceso de “paz total” que busca el Gobierno de Gustavo Petro. La ruta de diálogos fue instaurada en la cárcel de máxima seguridad de Itagüí, donde se congregaron los jefes de distintos grupos delincuenciales para hablar sobre el abandono de la vida delictiva y el sometimiento a la justicia.

En la concertación estuvo una comitiva del Estado encabezada por el Alto Comisionado para la Paz, Danilo Rueda; la senadora del Pacto Histórico, Isabel Zuleta; el exsecretario de Gobierno de Antioquia y exasesor de Paz Jorge Mejía Martínez.

Por parte de los grupos delictivos del Valle de Aburrá estuvieron 17 cabecillas de más de 200 redes delincuenciales que tienen presencia en el área metropolitana de Medellín. Entre los delincuentes estaban algunos líderes de La Oficina, Los Chatas, Los Mesa, Los Pachelly, Los Pesebreros, entre otros.

En el caso específico de Los Mesa tienen dentro de la comitiva negociadora a Jorge Vallejo Alarcón, alias ‘Vallejo’ y Gustavo Pérez, alias ‘El Montañero’, quienes expresaron su compromiso con el proceso de sometimiento a la justicia planteado por el Gobierno.

De acuerdo con lo establecido por la Oficina del Alto Comisionado para la Paz, la comitiva de negociación en Itagüí tendrá conversaciones como mínimo quincenalmente en la cárcel y los voceros de los grupos delincuenciales tendrán acceso a dos computadores donados por la Misión de Apoyo al Proceso de Paz en Colombia de la OEA y a teléfonos celulares monitoreados por las autoridades.

Adicionalmente, la Revista Semana informó que extraoficialmente se había pactado un cese de hostilidades entre los miembros de los grupos delincuenciales negociantes.

Pese al proceso de “paz total” grupos como Los Mesa siguen delinquiendo y afectando el orden público en el Valle de Aburrá, por lo que las autoridades no cesan sus operaciones militares para debilitar dichas estructuras criminales.

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