Dos atracos masivos en buses de servicio público fueron registrados en un periodo no mayor a 24 horas en Bogotá. El primero ocurrió el barrio Alquería la Fragua, de la localidad de Kennedy, cuando sobre las 9:00 p. m., cinco hombres abordaron un vehículo del Sitp que se dirigía hacia Venecia. Una vez en movimiento, sacaron sus armas y empezaron a intimidar a los pasajeros que regresaban del trabajo a la casa.
El coronel Camilo Torres, de la Policía Metropolitana, ofreció más detalles sobre el crimen para el Matutino de Arriba Bogotá: “En la avenida 68 con calle 30 sur se comete el hurto a un bus del Sistema Integrado de Transporte Público (Sito), allí pues según manifiestan quienes estaban al interior del bus, se subieron cinco sujetos, quienes los amedrantan con arma blanca”.
Al darse cuenta de lo que estaba ocurriendo, el conductor abrió las puertas para permitirles a los pasajeros escapar, pero de poco sirvió, ya que bloquearon el pasillo y apuñalaron a un hombre que mostró resistencia.
“El conductor pues, en una maniobra para tratar de mitigar este hecho frena el vehículo, abre la puerta del bus y de allí descienden las personas. Sale una persona lesionada, sin gravedad, con arma blanca y pues se comete el hurto a varias personas que”, indicó el coronel Torres.
Si bien, los delincuentes huyeron con los bolsillos llenos, las autoridades se encuentran inspeccionando los videos de las cámaras de seguridad del sector para dar con su paradero.
En concreto, “a través de actividades de policía judicial se está intentando identificar quienes serian estos sujetos que están ocasionando esta serie den hurtos. La información ciudadana es muy importante y sobre todo la denuncia para poder judicializar al momento de efectuar su captura”, insistió.
Y es que “la fuerza, principalmente, realiza patrullajes y sobre todo planes en los paraderos, puesto que estos vehículos solamente se detienen en ese punto para recoger o dejar pasajeros”, pero no está funcionando.
Así que “se están haciendo unos planes, precisamente con los cuadrantes, de requisa para poder detectar cuando es una persona que tiene algún tipo de arma que pueda ocasionar este tipo de actividades delictivas”.
No solo los buses del Sitp, también los buses intermunicipales se encuentran en riesgo
El segundo caso se registró en un bus de servicio intermunicipal que iba de Bogotá hacia Zipaquirá, cuando, en la Boyacá con calle 80 varios delincuentes abordaron el vehículo, haciéndose pasar por pasajeros.
Uno de ellos portaba un arma de fuego y el otro un puñal, que habría utilizado para pasar puesto por puesto reclamando los objetos de valor de al menos 12 personas.
“Le sacan la mano al conductor, abordan la buseta e inmediatamente uno se queda en la puerta con arma de fuego y el otro procede a robar a los pasajeros con un arma cortopunzante. Despoja a todos los pasajeros de sus celulares y pertenencias y, como se puede evidenciar, hay un pasajero que trata de reaccionar, pero desafortunadamente es demasiado tarde”, comentó una de las víctimas para el medio citado.
En su relato habla de un pasajero que intentó defenderse con un cuchillo que encontró en su maleta, pero tardó en encontrarlo y para el momento en el que se enfrentó a los delincuentes estos ya tenían los celulares de todos entre un morral, así que saltaron por la puerta.
“A los ladrones los estaban esperando, a cada uno, en una motocicleta. Se montaron como patos –que llamamos nosotros– y huyeron del lugar”, agregó.
Mientras, los conductores aseguran que hace falta mayor iluminación y presencia de la Policía en el sector de la calle 80. Y es que, el nivel de inseguridad es tal, que continuamente deben inspeccionar a quien se sube.
Ángel Rojas, conductor que frecuenta esta ruta, denunció para el medio citado que “se han presentado varios casos de robo. Inclusive, a mí me han atracado, varias veces. Ya dos veces me han atracado a mí por acá en la 80 y, la verdad, lo hacen casi siempre en la madrugada o ya tardecito de noche”.
Detalló que su modus operandi consiste en que “se suben 3 o 4 personas, pagan dos pasajes y en el momento lo encañonan a uno y a los pasajeros los atracan con revolver. En ese momento uno no puede hacer nada, se siente impotente”.
Algo en lo que coincide Iván Escobar, uno de sus compañeros del gremio “pagan el pasaje, pero ya más adelante ven que la gente está subiendo y cuando uno menos piensa, llegando el semáforo, sacan el arma de fuego o sacan puñal y los atracan rapidito. Y se van de donde está el semáforo hacia adentro (de la calle)”, lamentó.