A poco menos de tres meses de que se celebren las elecciones regionales en Colombia, el expresidente César Gaviria hizo una denuncia sobre el presunto riesgo que vivirían esos comicios, y que estaría siendo orquestado desde el Gobierno nacional con la supuesta ayuda del Consejo Nacional Electoral (CNE).
El también director nacional del Partido Liberal sindicó a la presidenta del CNE, la magistrada Fabiola Márquez, que representa al Pacto Histórico (la coalición de Gobierno) en ese organismo electoral. La acusó de querer “invadir” la autonomía de su colectividad mediante una cumbre con la que, desde su juicio, lo querrían sacar del cargo.
“Interferir en un partido político durante un año electoral con la amenaza de impedirle avalar candidatos en las próximas elecciones es un atentado al corazón de las instituciones democráticas”, advirtió Gaviria en una columna para la revista Semana.
El exmandatario colombiano, que dirige uno de los partidos con mayor presencia en el país, aseguró que no se había querido referir a la situación electoral que se avecina en el país, pero tras evidenciar varios de los supuestos riesgos que viviría el país, se le hacía “imperioso hacerlo”.
Aunque el CNE tiene magistrados de varios partidos, menos del Liberal, luego de que el Consejo de Estado tumbó la elección de Altus Alejandro Baquero Rueda por, presuntamente, haber mentido en su hoja de vida frente a su experiencia, Gaviria consideró que ese organismo debía actuar “de manera independiente e imparcial”; lo que, desde su perspectiva, no estaría haciendo la magistrada Márquez.
César Gaviria reconoció que sus denuncias eran basadas “en rumores” y no solo acusó al Gobierno del presidente Gustavo Petro de estar orquestando esa presunta maniobra en su contra, sino que le solicitó aclarar cuanto antes si eso era cierto o no.
“Es propio de los gobiernos autoritarios no respetar la autonomía de los órganos electorales”, aseguró el presidente liberal, quien reiteró que el Ejecutivo estaría “instrumentalizando” al CNE “para incidir en el funcionamiento interno de un partido”.
Es más, hasta señaló que desde el Gobierno colombiano estarían motivando a los militantes de esa colectividad a “irrespetar las decisiones adoptadas democráticamente por el mismo partido”. En sus dardos, incluso, comparó este tema con la caída del Muro de Berlín en Alemania.
“Bloquear su posibilidad de presentar candidatos en las elecciones es tomar el camino seguido por países donde imperó el totalitarismo hasta la caída del muro de Berlín, que nadie, sin importar su ideología, debería lamentar”, señaló César Gaviria.
El ahora ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, que era uno de los liberales más conocidos y a su vez uno de los mayores críticos de César Gaviria, ha invitado a sus excopartidarios para que pidan que el expresidente salga de la dirigencia del partido. En su columna, Gaviria le dejó un mensaje:
“El Ejecutivo, incluido el ministro del Interior, está obligado a respetar ese principio constitucional, así como las leyes que lo desarrollan. Pretender instrumentalizar al Consejo Nacional Electoral a través de una magistrada afiliada al partido de gobierno para bloquear a otro partido político en las elecciones es una violación flagrante de la separación de poderes y un atropello a la autonomía de la organización electoral”, dijo el exmandatario.
En apartes finales, Gaviria sindicó a la magistrada del Pacto Histórico de “una injerencia indebida” en su partido y le recordó las sentencias de la Corte Constitucional a su favor y de su partido. Así mismo, exhortó al Gobierno Petro a que exija garantías a los partidos para las próximas elecciones y desmientan los rumores que él denunciaba.
“El Partido Liberal ha acudido a todos los medios institucionales para proteger su autonomía”, dijo.