Uno de los principales grupos delincuenciales contra los que se enfrenta la Policía es el Tren de Aragua, una red de origen venezolano que se dedica esencialmente al tráfico de estupefacientes, armas, extorsiones y homicidios en las principales ciudades del país como Bogotá, Cali y Barranquilla, donde han atemorizado a la población con sus aberrantes métodos criminales.
En la avanzada de la Policía contra este grupo criminal se han efectuado 128 capturas, 28 allanamientos, 49 armas de fuego incautadas, 42.360 kilos de estupefacientes, 14 inmuebles puestos en extinción de dominio y múltiples líneas telefónicas interceptadas. En los audios obtenidos por la Policía, los criminales aceptan sus crímenes y detallan sus inhumanas maneras de delinquir.
Una de las grabaciones obtenidas en la operación San Martín III, que permitió la captura en Bogotá de 23 integrantes del Tren de Aragua, fue publicada por Noticias Caracol y evidencia cómo el cabecilla identificado como alias ‘Brayan’ reconoce por lo menos 32 homicidios que ha cometido como integrante de la peligrosa red delincuencial.
“Ninguna mujer, ningún mesero puede trabajar en sus negocios. Mujer o mesero que trabaje ahí va a tener problemas conmigo, pa’ que sepa. Yo no soy Nilson, ni Jhon, yo soy Brayan, el del Tren de Aragua”, sentencia el delincuente. En otra de las grabaciones, Brayan dice: “¿A usted no le contaron en Bogotá que aparecían los cuerpos en bolsas de basura por ahí en todo lado? (...) Yo tengo 32 homicidios ya comprobados, me faltan 15”.
En otra de las interceptaciones obtenidas por Noticias RCN, alias ‘Manguera’ y alias ‘el Gordo Gabriel’ conversan sobre extorsiones a trabajadoras sexuales de Bogotá:
- ‘Manguera’: “¿Qué pasó Gabriel, es ‘Manguera’? No ha venido nadie huevón”.
- ‘Gabriel’: “No, no, quédate quieto. Esas tienen hasta las 12, hasta las 7 de la noche, 12 de la noche para pagar”.
- ‘Manguera’: “Gabriel, yo le estoy diciendo a las muchachas que vamos a apoyar a los muchachos porque es verdad, a la hora de un brinco aquí, yo cuento con ustedes, ¿me entiendes?”.
- ‘Gabriel’: “Tú sabes huevón, tú sabes que, si nos joden, matarnos a quien sea, entrarnos a tiros, lanzarles granadas a los tipos, todo”.
De acuerdo con la investigación, el Tren de Aragua dominaba una cruzada entre trabajadoras sexuales colombianas y venezolanas, a quienes extorsionaban para dejarlas prestar sus servicios. En una llamada telefónica, Gabriel amenaza a una ciudadana colombiana por cruzar una frontera impuesta por la red delincuencial.
“Yo te voy a poner en línea con Brayan, porque él dio la luz que la mujer que viéramos entrando para allá se iba a meter en problema con nosotros ¿si me entiende ahora?, le vamos a meter tiros”, le dice Gabriel a una mujer llamada Alexandra, quien atemorizada le responde: “Yo no sé, yo ahí sí lo siento, no tengo por qué tener problemas con ustedes, si ustedes lo que me cobraron, yo lo pagué, yo en ningún momento me le corrí ni nada de eso”.
En otra conversación, Gabriel habla con una mujer venezolana, quien acusa a las trabajadoras sexuales colombianas de ponerlos al descubierto.
- Mujer: “Supuestamente, escuché un beta por ahí que ustedes mañana empiezan a cobrar, ¿verdad?”.
- ‘Gabriel’: “Sí, estamos a mitad de mes”.
- Mujer: “Ah bueno, pues las colombianas lanzaron un beta para que mañana, cuando ustedes empiecen a cobrar, a una gente de servicio social, no sé, no sé”.
- ‘Gabriel’: “Escúchame y ¿no hay posibilidad que vengas para acá y nos encerramos en una habitación a hablar de eso?”.
- Mujer: “No, yo no quiero bajar para allá, nada de eso. Yo lo estoy repitiendo que yo lo escuché por ahí”.
Entre tanto, Revista Semana dio a conocer cómo amenazaban los integrantes de la temida red delincuencial a sus víctimas para que accedieran a pagar las extorsiones.
“Por qué cortas la comunicación, tú crees que cortando la comunicación vas a resolver eso con nosotros. Me voy a meter contigo y con tu familia, para que tú veas que el Tren de Aragua no come de Gobierno colombiano ni de nadie. Vinimos aquí a matarnos con quien sea, pero si tú quieres medir fuerzas conmigo, atente a las consecuencias”, le dice uno de los delincuentes a su víctima en una llamada interceptada por la Policía.
En otro audio obtenido por el medio en mención, los delincuentes del Tren de Aragua le dan un ultimátum a una persona que no ha cumplido con el pago de la extorsión. “Hermano, solucióname que yo no quiero problemas con vos ni con nadie. Escúchame, para mañana, no te voy a decir más nada, ya te di unos días, y ya le diste la palabra a un malandro, te estoy dando un días de más gratuito, te estamos prestando un servicio”, le dicen a la víctima.
Los maleantes del Tren de Aragua alardeaban de que su organización criminal era internacional y que no le temen a las autoridades colombianas. “El Tren de Aragua aquí no anda jugando con nadie, ni las autoridades nos están poniendo parámetro aquí. Me imagino que tú quieres a tu familia. Te tenemos ubicado, sabemos que tú la semana pasada tuviste discusiones con alguien, te recuerdo que somos unas organización que está en México, Colombia y Chile, te hemos seguido y ni siquiera te has dado cuenta”, sentencia el extorsionista.
En la tercera fase de la avanzada contra el Tren de Aragua fueron necesarios seis meses de investigación, en los que cerca de 400 policías trabajaron en tareas de inteligencia para identificar a los cabecillas de la red delincuencial de origen venezolano y así capturar a 23 de sus integrantes.