Nuevamente se conoció de otro presunto atropello en contra de un colombiano en El Salvador, luego de que se conociera del caso de un joven que resultó encarcelado en el país centroamericano, al ser acusado de ser pandillero, de acuerdo con un reporte del informativo de televisión Noticias Uno que emitieron en la noche del lunes 3 de julio.
El afectado responde al nombre de Cristián David Corrales Cardona, quien cuando se fue del país no tenía antecedentes judiciales y mucho menos tatuajes en el rostro, por lo que la madre del muchacho, oriundo del municipio de Viterbo (Caldas) en la región del eje cafetero, fue sorprendida al ver una fotografía de su hijo en un informe periodístico del país centroamericano en donde, al parecer, su imagen fue manipulada para añadirle grabados en su cara.
“Para mí fue muy duro, empezando que él ni tatuajes tiene, él nunca se hizo poner esas cosas. Él es inocente de todas esas cosas”, afirmó Olga Cardona, la progenitora del encarcelado, en Noticias Uno.
En ese medio de comunicación también hablaron con la esposa del hombre, Beatriz Muñoz, quien relató por que su compañero sentimental llegó a Centroamérica.
“Salió para Guatemala, allá estaba difícil la situación, entonces le ofrecieron trabajo en El Salvador. Hay mucha incertidumbre, es como si los tuvieran secuestrados”, afirmó la mujer.
Este nuevo caso, de presuntos abusos de autoridad en contra de colombianos, se conoció gracias a José Antonio Potes, cuyo caso se hizo célebre, ya que por su admiración por el presidente salvadoreño, Nayib Bukele, viajó a ese país en busca de mejores oportunidades, pero resultó encarcelado al ser señalado de pandillero, todo por tener un tatuaje en el pecho.
No obstante, luego de que también en Noticias Uno dieran a conocer su caso, fue liberado y enviado a Colombia, desde entonces ha conocido más casos como el suyo.
“En este momento ando liderando un grupo con más de 35 madres de familia que tienen a sus hijo detenidos por agrupaciones ilícitas”, contó en ese noticiero.
Precisamente, los parientes de estos colombianos que están en las temidas cárceles que se construyeron en la administración de Bukele están pidiendo apoyo de la Cancillería colombiana para que logren el retorno de sus allegados, pero no han obtenido respuesta, así como tampoco en Noticias Uno.
Más de 300 personas murieron en prisión
En diálogo con Infobae América, Ingrid Escobar, directora de la ONG Socorro Jurídico Humanitario, denunció que más de 300 personas murieron en las cárceles de El Salvador durante el régimen de excepción y que el 92 % de ellas eran inocentes.
Dicha organización surgió para defender los derechos humanos de sindicalistas y de trabajadores organizados que fueron privados de su libertad cuando inició el régimen de excepción de Bukele, que para ella se impuso de forma improvisada e irresponsable.
“En los 15 meses del régimen de excepción, a nuestras oficinas han llegado más de 300 denuncias de muertes violentas y por negligencia médica de personas que están en fase de investigación, que han sido capturadas durante el régimen de excepción pero que no tuvieron derecho de defensa”, aseguró.
Sostuvo que “no se les respetó la presunción de inocencia, puesto que han fallecido dentro de centros penales a causa de torturas, como estrangulamientos; y también, un buen porcentaje por negligencia médica, es decir, el sistema penitenciario no les ha dado la medicación para enfermedades previas que ya llevaban las personas capturadas y para enfermedades que han sido adquiridas dentro de los centros penales y que también han sido causas de muertes”.
Luego expresó que, del universo de denuncias, que “son 300″; tienen “158 confirmaciones de muertes en centros penitenciarios” y que sus fuentes directas son los familiares.