El 7 de junio se desarrolló en Bogotá la VII Versión de Amor por el Brahman, Haciendo Historia, subasta de la Hacienda El Cucharo. La misma, finalizó con un hecho con pocos precedentes en Colombia, ya que el ejemplar de nombre Martina se subastó por una cifra histórica.
Una brahman rojo de 42 meses de edad (3,5 años), terminó vendida por $1.200 millones, a la Organización La Paz, luego de salir con un precio base de $500 millones.
La misma hacía parte de un lote especial y está marcada con el número 161-95. Tiene 875 kilogramos y cuyo primer parto lo destetó a los 207 días con 320 kilogramos.
De acuerdo con el certificado de Biotegan y a la presentación que se le hizo en la subasta, tiene una producción de 67 ovocitos (células germinales femeninas que se generan en los ovarios durante el proceso denominado ovogénesis) en promedio en campo, de los cuales 59 son viables. De igual forma, tiene 15,5 embriones transferidos en promedio por trabajo.
También, un promedio de preñez de ocho por trabajo. Hasta el momento lleva cinco crías vendidas en $265 millones, lo que da un promedio de $53 millones por cría. De igual forma, 8 aspiraciones foliculares vendidas en $240 millones, lo que da un promedio de $30 millones por aspiración. Asimismo, 18 preñeces vendidas en $325 millones, lo que da un promedio de $18 millones por preñez.
Así las cosas, Martina tiene un total de ventas de $765 millones. Hace un año se vendió una hija de ella, la 234-11, con 11 meses, en $80 millones. La última aspiración folicular la adquirió la Hacienda del Río y obtuvo 11 preñeces en la última aspiración folicular.
Brahman rojo o blanco: ¿cuál es el mejor?
El administrador de la Hacienda El Cucharo, Carlos Cadavid Ochoa, dio detalles sobre particularidades de estas dos razas de animales, que además de su pelaje, tienen grandes diferencias a nivel productivo y comercial.
Explicó a Contexto Ganadero que el brahman blanco o gris es una raza cebuina que lleva en Colombia más trabajo que el rojo. Dicho trabajo consiste en la consolidación de un biotipo de ganado que se adapte a las condiciones medioambientales y geográficas de nuestro país para la producción de carne y leche.
“Luego de varias importaciones efectuadas a partir de 1915 desde Estados Unidos, se comenzó a trabajar en cruzamientos con las razas criollas y es así como hoy en día podemos decir que más del 90% de la sangre existente en el hato nacional provienen de razas cebuinas, no exclusivas del brahmán, pero sí ha sido un aporte fundamental en el desarrollo ganadero del país”, aseguró.
Anotó que el brahman rojo proviene de las razas gyr e indubrasil (gyr y guzerá), por tanto, su habilidad materna es una característica muy apreciada y por esto es utilizada en los cruzamientos con razas especializadas en la producción de leche.
“El mejoramiento genético del brahman rojo ha sido vertiginoso a través de las biotecnologías. Es así, como vemos un animal moderno y eficiente, como raza productora de carne”, insistió.
Dijo al medio que a pesar de que esta raza es más nueva, está más avanzado en el tema de las biotecnologías. Es decir, blanco tiene 40-50 años más de trabajo que el rojo, pero el avance del rojo ha sido clave.
En cuanto al precio de los ejemplares, indicó que desafortunadamente para el blanco, tanto en ganados comerciales como en puros, el rojo tiene un valor comercial más alto, por lo que piensa que esto se puede dar por la versatilidad de la raza, porque se usa mucho para cruzamientos con ganados europeos para la producción de leche, pero también con ganados criollos y por eso se le llama de los siete colores, precisamente por el pigmento y por el color y por la habilidad materna.
En cuanto a la rentabilidad, prefiere el brahman rojo por lo versátil que son estos animales. Además, puntualizó que debe verse como raza que produzca carne.
“Hoy en día, en temas de ganancia diaria, el rojo ha mejorado mucho, pues hace 20-25 años las diferencias eran amplias en biotipo. Sin embargo, hoy por hoy estos dos tipos de animales son muy parejos en cuanto a ganancia de peso y todos estos aspectos”, concluyó el administrador de la Hacienda El Cucharo, Carlos Cadavid Ochoa .