Acciones adelantadas por la seccional de Boyacá de la Fiscalía General de la Nación en contra de los grupos dedicados al expendio de estupefacientes, permitieron impactar una red ilegal conocida como Los Delta, dedicada a comercializar marihuana y cocaína en áreas públicas, parques, zonas residenciales y entornos escolares de Chiquinquirá (Boyacá).
De acuerdo con la investigación, los integrantes de la organización se valían de una veterinaria para el expendio de drogas.
“Los Delta utilizaban un establecimiento de comercio ubicado en la principal plaza de mercado del municipio boyacense para comercializar marihuana y cocaína. Cálculos preliminares evidencian que la organización ilegal obtenía ganancias que superaban los $10′000.000 mensuales”, indicó el director (e) de la seccional Boyacá de la Fiscalía, Edison Robert León.
En desarrollo de diligencias de registro y allanamiento realizadas de manera coordinada con la Sijín de la Policía Nacional en Chiquinquirá, fueron capturados diez presuntos delincuentes que hacían parte de esta red. También incautaron alucinógenos, elementos para dosificar las sustancias ilegales y dinero en efectivo.
Según su participación en los crímenes, los procesados fueron imputados con delitos como tráfico, fabricación o porte de estupefacientes agravado, y destinación ilícita de bienes e inmuebles.
Siete de los investigados fueron privados de la libertad en centro carcelario. Los tres restantes deberán cumplir la medida de aseguramiento en sus lugares de residencia.
Habitantes de Socotá claman apoyo para retomar la tranquilidad en el municipio
La seguridad cada vez está en peores condiciones, especialmente en la provincia de Valderrama, donde responsabilizan a la minería y a la llegada de población extranjera de los continuos desórdenes en el municipio, de hurtos a casas y comercio e incluso del secuestro reciente de un minero, además de la violación de una adulta mayor.
William Correa, alcalde de Socotá, dijo que la seguridad se ha venido deteriorando en todo el territorio nacional y lo que hace cada uno de los alcaldes es poner en conocimiento de la nación y de los departamentos cada aspecto que genera zozobra en sus territorios, pero la respuesta es nula, y cuando llega es para disminuir el pie de fuerza en los municipios.
El funcionario señaló que quienes estarían detrás de los casos de inseguridad sería la población venezolana que reside en Socotá. Además, denunció que no hay presencia de fuerza pública y que no se cuenta con un vehículo apropiado para recorrer la parte rural y urbana del municipio.
“La gente está asustada, ya no se pueden dejar a los niños y niñas en las calles porque corren riesgo. Las motos y los vehículos son hurtados al frente de las casas”, dice el alcalde.
Ante los oídos sordos de las autoridades nacionales y departamentales, en Socotá han decidido, entre las comunidades y la administración municipal, hacer un frente de trabajo que vele por la seguridad de la población, aseguran que no pueden esperar a que se aumente el pie de fuerza o a que las autoridades encuentren la solución.
Correa manifestó que en el encuentro provincial con presencia del presidente Gustavo Petro se intentó poner sobre la mesa la problemática de seguridad en los municipios, pero ya se tenía establecida una agenda y no les permitieron el uso de la palabra a los mandatarios, por lo que se habló de la parte social, pero olvidaron la tranquilidad y la seguridad de las poblaciones.
El mandatario aseguró que la delincuencia común se volvió el pan de cada día y aclaró que “los habitantes dicen que no se van a dejar amedrentar y que tomarían acciones por mano propia para defenderse y defender sus territorios”.