Autoridades ya tienen pistas claras de los atracadores de la carrera Séptima: “No vamos a parar hasta dar con ellos”

Un violento atraco registrado en la tarde del 29 de junio en la carrera Séptima con calle 98, en el norte de Bogotá, dejó a una persona herida y causó impacto por la forma en que delincuentes abrieron fuego contra transeúntes y agredieron a sus víctimas.

El coronel Helbert Benavides, subcomandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, indicó que ya se están recopilando indicios sobre lo ocurrido. La primera prueba es la motocicleta que fue abandonada en la huida de los criminales, aparentemente por fallos mecánicos. En ella se buscan huellas dactilares, que serían pruebas clave para el caso.

“Una de las primeras pistas es la moto que los ladrones dejaron abandonada en medio de la huida, al parecer por fallas mecánicas, No obstante, las demás pruebas serían menos certeras, aunque pueden ser igualmente conducentes para ayudar a encontrar a los ladrones. Se trata de imágenes de videos y cámaras de seguridad para identificarlos, así como testimonios para elaborar retratos hablados”.

En ese sentido, Benavides anunció la creación de un equipo especial, con un fiscal especializado que se dedicará a investigar lo concerniente al caso. Asimismo, indicó que los retratos se divulgarían en las próximas horas.

Las autoridades manifestaron que durante este asalto los ladrones hirieron al conductor de un vehículo particular. Según Noticias Caracol, uno de los disparos lo impactó en la pierna izquierda y él mismo tuvo que conducir hasta la Clínica El Country para ser atendido de emergencia.

De acuerdo con el comunicado de la clínica, el hombre ingresó hacia la 01:30 p. m. a urgencias y en este momento se encuentra en sala de cirugía bajo pronóstico reservado.

Asimismo, el noticiero anteriormente mencionado mostró cómo quedó el carro del conductor herido y en las imágenes se detallaron las balas que dañaron la infraestructura del vehículo.

Los sindicados habrían interceptado al hombre que salía de la entidad bancaria para robarle el dinero que había retirado. La víctima habría ejercido resistencia para oponerse al hurto, razón por la cual los delincuentes le habrían propinado un disparo, hechos que observó el conductor de una camioneta que estaba cerca al lugar en el que se registraron los hechos.

Después de que los criminales se subieran a la moto en la que se movilizaban, el conductor los embistió metros más adelante, lo cual los dejó levemente lesionados, razón por la cual intimidaron al conductor de un taxi que transitaba por la carrera Séptima para que les dejara el automóvil en su poder.

Los delincuentes se movilizaron por unas calles hacia el sur y pocos minutos después habrían descendido del carro nuevamente para emprender nuevamente la huida en una motocicleta, la cual consiguieron cuando decidieron bajar del taxi sobre la calle 98 con carrera Séptima, al norte de la capital colombiana.

En video quedó registrado el momento en el que, con armas de fuego en mano, los criminales intimidaron al conductor de una motocicleta quien sería un domiciliario, al que golpearon y obligaron a bajar de su vehículo ante la atenta mirada de algunos conductores que se detuvieron mientras que observaban lo que sucedía.

Asustado, el domiciliario huyó del lugar mientras que uno de los criminales intentaba encender la motocicleta que habían acabado de hurtar. Simultáneamente, el otro ladrón intimidó a los conductores de los carros que transitaban a su alrededor, intentando abrir las puertas de los automóviles mientras permanecía con el arma de fuego en su mano.

Al parecer, el criminal que intentaba encender la motocicleta que le habían quitado al domiciliario no logró su objetivo y alertó a su compañero que, tras intentar abrir la puerta de una primera camioneta que aceleró rápidamente, intimidó al conductor de un segundo carro, al cual logró golpearle la puerta pero no acceder al vehículo.

Los delincuentes se toparon con otra motocicleta que estaba en el suelo a pocos metros de donde habían hurtado la primera motocicleta, pero tampoco habrían podido encenderla, quedando expuestos frente a los transeúntes que transitaban por el sector que los identificaron, además de los habitantes de los edificios cercanos.