Una dura baja recibió la compañía antinarcóticos de control portuario de la Policía, pues Kenia, una de sus integrantes más importantes, murió envenenada en medio de una misión en un puerto de Santa Marta, donde examinó una carga de droga que estaba contaminada con veneno, que produjo su muerte tras cinco años de servicio en la institución.
De acuerdo con la versión entregada por las autoridades tras conocer el envenenamiento de Kenia, se le brindó la asistencia médica correspondiente, pero fue inútil y se produjo el deceso de la perra, que durante sus años en las filas de la institución propició grandes golpes al narcotráfico, lo que la convirtió en objetivo militar de los carteles de la droga afectados por su heroica labor.
La Policía antinarcóticos dio a conocer que en el operativo también fue afectado otro perro que estuvo presente en la misma zona donde resultó envenenada Kenia, pero que por fortuna, pudo superar la crisis. “Actualmente, se está adelantando las investigaciones correspondientes, con el fin de poder determinar la sustancia que habría ocasionado la muerte de Kenia y poder dar con el paradero de los responsables de este lamentable hecho”, agregó la Policía.
Kenia era una perra de la raza pastor belga, que nació el 5 de junio del 2018 en el criadero de Mancilla de la Policía Nacional, ubicado en el municipio de Facatativá (Cundinamarca) y durante sus 5 años de vida descubrió más de 12 toneladas de cocaína.
La perra de la Policía antinarcóticos fue despedida con honores en medio de una ceremonia religiosa presidida por un sacerdote y en la que estuvieron presentes sus compañeros humanos y caninos de la compañía antinarcóticos de control portuario de la Policía de Santa Marta.
Amenazaron de muerte a Killer, otro perro antinarcóticos
La avanzada contra los narcotraficantes en Colombia ha sido efectiva en las últimas semanas y gran parte del éxito de las operaciones es gracias a la implementación de perros antinarcóticos, lo que los ha convertido en objetivo militar de los criminales. Recientemente fue amenazado de muerte Killer, un labrador retriever, conocido por la criminalidad como “el amarillo”.
Killer está adscrito a las filas de la sexta brigada del Ejército y tiene azotados a los narcotraficantes del Tolima, pues gracias a su prodigiosos olfato han sido incautadas más de 1,5 millones de dosis de marihuana en el municipio de Cajamarca, ubicado sobre el cruce de la cordillera central, en territorio tolimense.
“No se arriesgue a meterse por ahí que usted sabe que está el perrito, ese amarillo. No se le vayan a meter porque usted sabe que ese amarillo coge todo ahí, y no hemos podido hacerle la vuelta, no hemos podido con el amarillo ese hacerle la vuelta”, dicen los criminales en uno de los audios interceptados por la Fuerza Pública.
Ante las amenazas, las autoridades asignaron escoltas a Killer las 24 horas del día. “Las amenazas se han venido realizando a través de audios. De igual manera, lo ha detectado la inteligencia militar. Para ello, hemos implementado una serie de acciones como seguridad de los caniles con un centinela que está las 24 horas, de igual manera la alimentación del canino y la toma de agua es controlada y cuando se realizan las diferentes operaciones tenemos la seguridad con los soldados de sectores identificados”, declaró en entrevista con Noticias Caracol el teniente coronel Fabián Castellanos, comandante batallón Rooke de la sexta brigada del ejército.
En sus nueve años de servicio, Killer se ha convertido en uno de los integrantes más importantes del ejército en Tolima, pues solo entre el 2021 y lo que va corrido del 2023 detectó 1.515.000 millones de dosis de estupefacientes, debilitando así las estructuras financieras de los grupos armados que se lucran con el microtráfico en territorio pijao.