Ante las declaraciones de Mario Fernández Alcocer, primo de la primera dama, sobre las reuniones sostenidas con varios funcionarios del Gobierno nacional, el exministrro del Interior Alfonso Prada se refirió a esta afirmación y su relación con el otrora senador del Partido Liberal.
En diálogo con El Tiempo, el ahora embajador de Colombia en Francia aseguró que sí se reunió con Fernández en su despacho, pero que fue por su condición de congresista y por el conocimiento que tiene sobre el Legislativo. Además, explicó que las reuniones se llevaron a cabo tanto por el triunfo electoral de Gustavo Petro en la segunda vuelta presidencial como por las coincidencias de ambos alrededor del programa de gobierno del actual jefe de Estado.
De hecho, admitió que aquellas reuniones también tuvieron la presencia de Ana María Castañeda, esposa de Fernández Alcocer y senadora por Cambio Radical (partido opositor a la administración Petro) en calidad de analista para aportar conceptos sobre su visión del Congreso y “entender mejor la situación política del país”.
Por otra parte, ante el medio citado, Luis Fernando Velasco, actual jefe de la cartera del Interior y cuota de los liberales en el gabinete, dijo que su relación con el primo de Verónica Alcocer no es nueva; incluso, recordó que inició cuando ambos pertenecieron a la colectividad que hace parte de la ahora coalición de Gobierno.
En ese orden, admitió también que se llevaron a cabo reuniones entre ambos no solo ahora que es ministro, sino también cuando fue Consejero Presidencial para las Regiones. En una de esas cumbres, dijo que hablaron de la crisis humanitaria en la subregión La Mojana a causa de la ola invernal.
“Obviamente, hicimos algún tipo de gestión para ayudar en su momento a buscar alguna respuesta” mencionó. De acuerdo con su versión, también sostuvieron charlas con campesinos y empresarios y justificó diciendo que esa es la gestión que hace un líder regional.
Velasco Chaves aseguró que a través de esas reuniones, Fernández Alcocer no incurrió en tráfico de influencias; en cambio, ratificó que esa gestión fue hecha dentro de sus funciones como líder en las regiones. En esa línea, la ministra de Vivienda, Catalina Velasco, (otra cuota liberal) explicó que el senador que fungió entre 2014 y 2018 trabajó con ella en varias jornadas de diálogo para hablar sobre saneamiento.
“Nosotros somos realmente muy estrictos y los proyectos no pasan sin todas las condiciones técnicas, financieras y presupuestales”, dijo la alta funcionaria en entrevista con La W. Dijo que conoce personalmente a Fernández Alcocer, pero que solo han hablado de temas políticos y de proyectos en departamentos como Sucre, del cual es oriundo.
Vale indicar en la entrevista con el periódico mencionado, Fernández Alcocer aseveró que los cuestionamientos por su cercanía con el Gobierno pueden tener relación con sus antecedentes, pues tuvo un proceso en la Corte Suprema de Justicia por parapolítica y por, supuestamente, tener injerencia en la designación de un contrato.
“El excongresista habría suscrito dos letras de cambio con el fin de respaldar el pago de dichas contribuciones, una a favor del exparamilitar García Ávila por $200.000.000 y otra por $700.000.000 a la aludida organización delincuencial”, detalló el alto tribunal en el auto que cerró ese expediente. Fernández, ante esto, negó haber incurrido en tráfico de influencias ante el Ejecutivo.
“Soy un actor regional en Sucre hace años; le colaboro a la primera dama en algunos temas en específico y el escenario donde estoy —Palacio de Nariño— permite que proyectos importantes para el desarrollo de Sucre estén en la agenda de la que hablo informalmente con ministros, pidiendo que no olviden a una región relegada”, reiteró la figura que, por decisión del propio presidente Petro, tuvo que distanciarse de él.