El actual presidente de la Cámara de representantes, David Racero, recientemente hizo una polémica afirmación a través de su cuenta oficial de Twitter, en la que comparó el sistema de salud colombiano con los paramilitares rusos de Wagner, cuyo jefe, Yevgeny Prigozhin, se rebeló en contra del presidente Vladimir Putin.
El congresista del Pacto Histórico aseguró que era un riesgo dejar la sanidad en manos de privados, por las consecuencias que podría tener, como ocurrió en Rusia con el mencionado grupo de mercenarios.
“Así como se comprende que privatizar la seguridad, contratando mercenarios a lo Wagner, es mal negocio, también se entenderá que es la misma perversión y riesgo social la privatización de la salud”, publicó el representante sus redes sociales.
La publicación, que luego borró el representante, fue calificada de absurda y que no estaba a lugar respecto a los dos temas, por lo que Racero dio una nueva explicación sobre la comparación que trataba de hacer.
“La conversación que se plantea es que la seguridad, como la salud, son derechos y deben ser provistos por el Estado. Cederlos siempre implicará un riesgo en el que los intereses privados pueden llegar a privilegiar los propios beneficios sobre el interés general o de los más vulnerables”, publicó Racero en respuesta a ese trino.
A pesar de ello, las declaraciones del presidente de la Cámara no lograron convencer a Alejandro Gaviria, exministro de Educación durante el Gobierno de Petro, entre 2022-2023. Gaviria mostró su indignación y consideró que las palabras del presidente fueron un “insulto” al sector de la salud.
“Este debate debe darse con rigor y respeto. En Colombia casi 80% de los servicios de alta complejidad son prestados por instituciones privadas. La gran mayoría excelentes, merecen nuestro aprecio y admiración. Su comentario es un exabrupto, un insulto para el sector”, respondió el exministro en Twitter.
El intento por sacar a flote la reforma a la salud
La intención del Gobierno del presidente Gustavo Petro de implementar una reforma al sistema de salud ha generado controversia y un impacto significativo los congresistas colombianos. En su afán de defender y promover la reforma en la rama legislativa, Petro puso a la coalición que mantenía con los partidos y sectores políticos tradicionales con los que buscaba establecer una alianza al inicio de su mandato.
Aunque el proyecto se mantiene en el Congreso, desde el Ejecutivo están trabajando en una nueva estrategia para poder sacarlo a flote en medio de la negativa de las mayorías.
De hecho, el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, le sugirió al presidente Petro que esta iniciativa, junto con la pensional, se discutan cuando inicie el próximo periodo legislativo; es decir, desde el 20 de julio, para que de esta manera se pueda contar con los votos necesarios para que sean aprobadas.
“Desde el Gobierno debemos concentrarnos en asegurar las mayorías a través de diálogos parlamentarios en la Cámara y el Senado durante este mes, para facilitar el proceso de las reformas sociales. A partir del 20 de julio, podremos entrar con gran entusiasmo para finalizar las reformas que ya han iniciado y, en el caso de las reformas laboral y educativa, empezar para completar el conjunto de las cuatro reformas sociales que necesita el país”, aseguró Velasco.
Finalmente, se conoció que por medio de una carta, actores del sector de la salud insisten en la necesidad de construir entre todos una iniciativa que signifique un avance frente a lo que existe actualmente.
“Hacemos un urgente llamado al Gobierno nacional y al Congreso de la República, para considerar las manifestaciones que hacemos, las cuales tienen el genuino interés de advertir los riesgos que para los pacientes, usuarios, institucionalidad y sostenibilidad de nuestro sistema de salud podrán materializarse”.