En medio de la problemática que existe en torno al turismo sexual que se ha fomentado desde diferentes ciudades del país, las autoridades descubrieron el aberrante caso de un turista estadounidense que habría cometido una serie de delitos sexuales contra menores de edad en medio de una visita al territorio nacional.
Haven Edwardantione Cates III, quien frecuentaba Colombia desde el 15 de abril de 2018, fecha en la cual se registró su primer viaje hacia el territorio nacional, fue capturado en una calle de Chicago, Estados Unidos, en una operación conjunta entre las autoridades colombianas y del país norteamericano, al ser sindicado de abusar sexualmente de al menos tres menores de edad en Medellín y Bogotá.
El turista, que cuenta con más de 36 movimientos migratorios en su pasaporte como resultado de sus constantes viajes hacia Colombia, habría buscado menores entre 15 y 17 años, a las que les ofrecería dinero para que accedieran a sus pretensiones sexuales, pero les exigiría un requisito para realizar el pago.
Según informaron las autoridades, Cates III les pediría a las víctimas que se tatuaran su nombre una vez finalizaran el acto sexual, de tal manera que el procediera con el pago, emulando una práctica muy común con el ganado en la que las reses son marcadas para ser identificadas por sus dueños.
De negarse a realizarse el tatuaje, el turista amenazaba a las víctimas con no realizar el pago de sumas entre los 100 y 300 dólares, lo cual se habría pactado desde antes de finiquitar el encuentro. Así mismo, a las personas que accedieron, el abusador les habría entregado entre 50 y 100 dólares adicionales para que fueran a “marcarse”.
Como una prueba de que se hubieran plasmado el tatuaje, Cates III les habría solicitado a sus víctimas fotos de cuerpo entero con la marca, cumpliendo así con todos los fetiches sexuales que solicitaba el turista en sus constantes visitas al país, en medio del turismo sexual que atrae a miles de visitantes al territorio nacional.
La captura del norteamericano se logró luego de que, una vez conocidas las denuncias y evidencias por parte de las víctimas, agentes federales de Chicago así como de la Dirección de Protección y Servicios Especiales (Dipro) de la Policía Nacional y del Departamento de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) de Estados Unidos llegaran hasta su vivienda para realizar la respectiva detención.
Tras el operativo, que también contó con el apoyo de la ONG Operation Underground Railroad (OUR), que se encarga de brindar protección a las menores de edad que son víctimas en este tipo de delitos, se espera que se realicen las primeras audiencias en contra del abusador en un tribunal federal de Estados Unidos, en donde podría afrontar una medida de detención o se le deja en libertad bajo fianza.
Los casos protagonizados por Cates III hacen parte de cifras que se registraron entre el 1 de enero al 15 de junio de 2022, periodo de tiempo en el cual hubo 36.627 conductas delictivas contra menores de edad, números mayores a los que se han registrado en el presente año 2023 en el que han habido 30.707 casos.
Así mismo, desde la Dipro indicaron que este año se han contabilizado 5.455 delitos sexuales contra niños y adolescentes en todo el territorio nacional, los cuales han sido perpetrados por parte de extranjeros, así como personas nacionales. Además de ello, se han registrado 279 alertas a través de redes sociales en las que se han denunciado delitos cibernéticos en contra de esta población.
El ente policial solicitó a las mujeres que hayan sido víctimas de vulneraciones sexuales por parte de ciudadanos norteamericanos que establezcan contacto con ellos a través de los diferentes medios de comunicación que establecen en sus redes sociales, así como en su página web.