En medio del inicio del juicio contra Margareth Lizeth Chacón Zúñiga, mujer clave en el asesinato del fiscal paraguayo Marcelo Pecci, su esposa, Claudia Aguilera, pidió garantías para su participación de forma virtual y no presencial, pues insistió en que no quiere regresar al lugar donde fue asesinado el paraguayo.
Este llamado lo hizo porque durante mayo, la Corte Constitucional determinó que las actuaciones judiciales en materia penal deben realizarse de forma presencial, poniendo fin a las intervenciones por medio de plataformas digitales a distancia que surgió en 2020 durante la pandemia del covid-19. Dicha medida, se había tomado con el primer objetivo de no pausar los casos judiciales y no represar los despachos de jueces y fiscales.
En ese sentido, la viuda del exfiscal antimafia manifestó su rechazo a lo determinado por el alto tribunal y el hecho de acudir obligatoriamente a las audiencias, pues según ella es una “decisión que abiertamente transgrede mis derechos como víctima, madre y mujer”.
“No quiero ni voy a regresar a Colombia, lugar donde mataron a mi esposo, y mi hijo y yo pudimos haber muerto (...) Volver a Colombia se vuelve un activador del trauma que vivió estando embarazada”, manifestó Aguilera en diálogo con el medio paraguayo Última Hora.
En la diligencia, la viuda, que actualmente reside en Paraguay, añadió que “desde la muerte de mi esposo y padre de mi hijo, la gravedad de esta situación me lleva a romper el silencio y expresar de manera firme mi más sentida protesta por esta decisión de la Corte Constitucional colombiana”. Acto seguido, consideró como “lamentable” el hecho de que el tribunal, a través del fallo emitido, la obligue a viajar a Colombia varias veces al mes para las audiencias.
“No es solo por costos o los gastos que ello implica, sino la forma como fracturan nuestra cotidianidad y nuestra recuperación del trauma. Recuerde señora jueza que soy madre de un menor lactante por quien tengo que velar por la muerte de su padre”, sentenció la periodista.
De acuerdo con su concepto, los avances del proceso se lograron por delaciones y alegó que justo cuando las investigaciones estaban avanzando “llega esta decisión (de la Corte) que obligaría a los delatores de quienes estuvieron detrás de estos hechos a declarar en una sede judicial sin garantías de seguridad”.
Igualmente, Aguilar dijo que ante todo lo anterior le surgen dudas y que no quiere creer que pretenden negarle “el acceso al juicio del asesinato de mi esposo, tampoco quiero pensar que buscan impedir que la justicia avance, y no entiendo por qué revictimizarnos como víctimas, como familia y también a todo el pueblo paraguayo”.
Marcelo Pecci, uno de los funcionarios más eficaces en sus investigaciones contra estructuras criminales en Paraguay, fue asesinado el 10 de mayo de 2022 por sicarios en una moto acuática cuando estaba en una playa de un hotel en la isla de Barú (Cartagena), mientras se encontraba de luna de miel con su esposa.
Por este caso, un juez de la República condenó a 25 años y seis meses de prisión a los hermanos Andrés Felipe (esposo de Chacón Zúñiga) y Ramón Emilio Pérez Hoyos (de nacionalidad colombiana), que aceptaron su participación en la planeación y financiación del asesinato del reconocido funcionario.
De acuerdo con la Fiscalía General de la Nación, los dos hombres hacen parte de una organización delincuencial de alcance transnacional que tendría sus bases en Paraguay. Así las cosas, hasta el momento son siete personas judicializadas por esta acción criminal; de estas, cuatro aceptaron sus responsabilidades y fueron condenadas.
*Con información de EFE.