Carlos Alberto Vargas Bautista, exmagistrado que se encontraba en medio de un juicio ante la Corte Suprema de Justicia por corrupción judicial, recuperó su libertad después de que el Tribunal Superior de Bogotá le otorgara la condición por vencimiento de términos luego de más de 300 días en los que no hubo sentido de fallo.
El exmagistrado fue vinculado al proceso después de que la Fiscalía General de la Nación descubriera que había montado una empresa criminal en su despacho junto con su exnovia Kelly Andrea Eslava Montes y su primo Aldemar Vargas, en la cual se dedicaban a torcer fallos que figuraban en el tribunal, a cambio de millonarias sumas de dinero.
Vargas Bautista permanecía en prisión domiciliaria desde diciembre de 2019, a pesar de que la Fiscalía General de la Nación solicitó inicialmente medida de aseguramiento en centro carcelario en su contra, pero su juicio comenzó en febrero de 2020, en un proceso en el cual el ente acusador le embargó doce bienes avaluados en más de 9.000 millones de pesos ubicados en los municipios de Tibacuy (Cundinamarca), Rivera (Huila) e Icononzo (Tolima) además de algunos inmuebles en Bogotá y Bucaramanga.
La entidad que hoy dirige Francisco Barbosa indicó en aquella oportunidad que la institución había recolectado las pruebas necesarias para establecer que las propiedades “fueron adquiridas con los dineros que, supuestamente, recibió por direccionar sus decisiones para favorecer los intereses de algunas de las partes en los procesos”.
Además de las pruebas que las autoridades encontraron en contra del exmagistrado, su exnovia, que goza de inmunidad penal por los delitos de cohecho por dar u ofrecer, falsedad en documento privado, acceso abusivo a sistema informático agravado y fraude procesal, manifestó en una de las audiencias que se desarrollaron en medio del proceso que ambos desviaban fallos del alto tribunal.
Uno de los casos de más renombre en los que estuvo involucrado el exmagistrado fue la decisión que tomó contra la Empresa de Acueducto de Bogotá sobre la propiedad del humedal Jaboque en 2014, cuando condenó a la ciudad a pagar una millonaria suma de dinero por haberse negado a comprar a un particular un predio en las inmediaciones al humedal, cuando el terreno era propiedad del distrito y se encontraba en una zona de manejo ambiental.
Kelly Eslava, que también admitió haber mantenido una relación sentimental con Vargas, ahondó en detalles sobre cómo era el procedimiento que gestionaban cuando declaró ante la justicia el 6 de junio de 2022: “Me comunicaba con el magistrado para decirle que ya estaba todo hecho. Los negocios con el magistrado Vargas siempre eran claros en que él piloteaba la cuantificación del pedido, y de distribución nunca hablamos”.
Además, Eslava indicó cómo era el proceso en el cual se realizaba el pago acordado en el cual estaba involucrado su primo Aldemar Vargas, aunque manifestó no tener conocimiento del cómo se pactaban los acuerdos monetarios por parte del exmagistrado: “El dinero lo tenía que recibir yo y consignárselo al magistrado a través de la cuenta de su primo Aldemar”.
Según lo establecido por el código de Procedimiento Penal en su artículo 317, “después de que transcurridos 150 días contados a partir de la fecha de inicio de la audiencia de juicio, no se haya celebrado la audiencia de lectura de fallo”, el procesado será merecedor de recuperar su libertad, punto clave para entender la liberación del exmagistrado que continuará vinculado al proceso por los delitos de concierto para delinquir en calidad de autor, cohecho propio y prevaricato por acción, proceso por el cual se encuentra vinculado desde hace más de cuatro años cuando fue acusado por primera vez.