Un acto de intolerancia se registró en el barrio Pinar del Río, ubicado en el suroccidente de Barranquilla, donde un hombre apuñaló a un policía que llegó hasta el lugar para intervenir una riña. En medio de la gresca, el uniformado desenfundó su arma de dotación y le disparó en la pierna a su agresor.
En su reporte, la Policía indicó que llegó hasta el lugar de los hechos tras el reporte de la comunidad de una alteración del orden público en plena vía. En su intento de clamar los ánimos, el patrullero se interpuso entre los dos involucrados en la riña, pero uno de los sujetos usó un arma blanca para agredir al uniformado.
Herido, el policía reaccionó de una manera inesperada y le disparó al delincuente identificado como Jesús Manuel Mejía Barrios, de 26 años de edad, oriundo de El Copey, Cesar. El uniformado redujo a su agresor y procedió a su captura; sin embargo, la comunidad se alteró por el disparo y una turba enardecida atacó a la unidad policial, causándole politraumatismos al integrante de la fuerza pública.
“Nuestro policía sacó su arma de dotación para salvaguardar su vida y la vida de los terceros, y ahí la comunidad arremete contra el uniformado, fracturándole una de sus manos”, declaró el coronel Giovanny Barrero, comandante operativo de la Policía Metropolitana de Barranquilla.
Las autoridades indicaron que la comunidad intentó hacer una asonada contra los uniformados y fue necesario el apoyo de otras unidades que lograron controlar la situación y capturaron al agresor por el delito de violencia contra servidor público e irrespeto a la autoridad. En el hecho de intolerancia también resultó herido un menor de 15 años, quien sería la víctima inicial de Mejía Barrios.
Tanto el uniformado como Jesús Manuel Mejía fueron remitidos hasta un centro asistencial de Barranquilla donde trataron sus heridas y fueron dados de alta tras los hechos. En el caso del agresor, fue remitido trasladado hasta un centro de detención y posteriormente presentado ante un juez de control de garantías, que legalizó su captura.
La intolerancia no para en Barranquilla, más de 1.000 riñas
La Policía Metropolitana de Barranquilla dio un balance de seguridad del pasado puente festivo en el que registraron más de 1.000 riñas, 765 comparendos a conductores de vehículos, varias capturas y armas incautadas en el área metropolitana de la capital atlanticense.
Según las cifras entregadas por la Fuerza Pública, cerca de 5.000 uniformados se encargaron de preservar la seguridad en Barranquilla, dejando como resultado a 38 personas capturadas por diferentes delitos, entre ellos fabricación, tráfico o porte ilegal de armas de fuego y municiones, tráfico de estupefacientes y hurto.
En los operativos los uniformados incautaron 48 armas de fuego, recuperaron un carro y dos motos que habían sido hurtadas e inmovilizaron 134 vehículos. “Desplegamos toda la capacidad humana y logística sobre los ejes viales de la ciudad realizando puestos de prevención vial a las entradas y salidas de la misma, con el fin de garantizar la movilidad de todos los viajeros durante este fin de semana”, dijo la Policía Metropolitana de Barranquilla.
En materia de accidentalidad, las autoridades registraron 43 siniestros viales, 11 personas lesionadas y ninguna fallecida; asimismo, fueron multados 37 conductores por conducir bajos los efectos del alcohol e irrespetar las normas de tránsito.
Según el balance presentado por las autoridades, en el pasado puente festivo se redujeron las acciones delictivas en cuanto al hurto a personas, comercio, residencias y automotores con relación al año anterior.