Cada día se conocen nuevos detalles de cómo lograron sobrevivir los cuatro menores indígenas que duraron desaparecidos 40 días en la selva del Guaviare, luego de que la avioneta en la que viajaban con su madre se estrellara el pasado 1 de mayo.
Aunque en los últimos días Manuel Ranoque, el padre de los niños más pequeños, aseguró que Magdalena Mucutuy, la madre de los pequeños, permaneció con vida cuatro días tras el accidente, en las últimas horas el abuelo de los menores, Narciso Mucutuy, desmintió la versión.
Es de recordar que en diálogo con diversos medios de comunicación, Ranoque, el padre de Tien Noriel (5 años) y Cristin (1), los niños más pequeños, había asegurado que la madre de los menores sobrevivió al accidente y que, incluso, ella misma alcanzó a decirle a Lesly (13), su hija mayor, que se fuera con Soleiny (9) y sus otros dos hermanos del lugar y buscaran ayuda.
“Ellos mismos darán sus declaraciones. Ella (Lesly) lo único que me aclara es que la mamá estuvo cuatro días viva, entonces antes de morir les dice tal vez váyanse y ustedes van a mirar quién es su papá y su amor de papá”, declaró Ranoque a los medios recientemente.
Sin embargo, con el paso de los días salió a la luz la mala relación que la familia Mucutuy tenía con Ranoque a tal punto que se conocieron denuncias en su contra por presunto maltrato físico a la mamá de los niños y de, al parecer, intentar agredir sexualmente a una de las menores.
En medio de ese escándalo, Narciso Mucutuy desmintió en diálogo con la revista Semana la versión del padre de los menores en la que aseguraba que su hija Magdalena había sobrevivido cuatro días, tras el accidente de la avioneta en la vereda Palma Rosa, en zona rural del municipio de Solano, departamento de Caquetá.
De acuerdo con el abuelo de los menores, la hermana mayor de los pequeños, Lesly, le contó que tanto su madre Magdalena Mucutuy, el capitán de la aeronave, Hernando Murcia y el director de la fundación de profesionales indígenas Yetara, Herman Mendoza Hernández, murieron al instante luego de que la avioneta impactara en la selva.
“La misma niña dice que los tres (adultos) ahí mismo, cuando cayó la avioneta quedaron muertos. Si la persona que dijo que mi hija Magdalena quedó viva tres o cuatro días eso es mentira, porque en ese momento quién los miró para decir está viva, eso es mentira”, señaló don Narciso Mucutuy al citado medio.
Mucutuy además detalló a Semana que, según la versión de su nieta, ella viajaba sentada sobre el regazo de su madre por lo que al momento del accidente sería su cuerpo el que la protegería, lo que le permitió sobrevivir.
“La niña venía sentada en las piernas de la mamá y ellos iban atrás, los otros tres. Mi hija estaba cerca del piloto cuando cayó la avioneta: fue un solo golpe. Se fueron los tres, uno sobre otro, y la niña quedo debajo de la mamá. Eso es lo que me contó la niña. Entonces cuando al rato la niña reaccionó y vio que se movía una patica y entonces ella dijo: mi hermanita está viva y la jaló. Eso es lo que la niña me contó”, relató el abuelo de los menores al mismo medio.
Don Narciso Mucutuy así mismo corroboró a la publicación bogotana que, según la versión de Lesly, ella y sus hermanos permanecieron cuatro días junto a la avioneta esperando a que alguien los rescatara. Al notar que nadie llegaba por ellos, los cuatro hermanos se adentraron a la selva esperando hallar un camino o a alguna persona que los pudiera auxiliar.
De acuerdo con el abuelo de los hermanos, fueron fiambre, tres libras de marinitas y polvo de yuca los alimentos con los que los cuatro menores se mantuvieron con vida durante los días que permanecieron junto a la avioneta. Ya cuando se adentraron a la selva usaron sus conocimientos ancestrales para identificar frutas y comida silvestre con la que pudieran sobrevivir.