Quizá el nombre de Griselda Lobo Silva no sea familiar para los colombianos, pese a que desde 2018 hace parte del Senado de la República y que en 2020 fue segunda vicepresidenta de la corporación, con el apoyo –incluso– del entonces congresista y expresidente Álvaro Uribe Vélez, quien en su momento no tuvo reparo alguno en apoyar esta designación.
Pero si se habla de Sandra Ramírez, tal vez sea más fácil recordar a la protagonista de la más reciente miniserie documental de Señal Colombia, llamada Los juegos de la guerra, en la que la mujer estelariza el episodio La fotógrafa de mariposas de alas transparentes, en el que se cuenta cómo pasó de la selva al Capitolio.
La mujer, quien cumplió el 15 de mayo 60 años, fue integrante de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Y no solo eso: hasta su muerte, el 26 de marzo de 2008, fue la pareja sentimental de Pedro Antonio Marín, alias de Manuel Marulanda Vélez o Tirofijo; máximo cabecilla de esta organización ilegal desde 1990.
“Este es un trabajo cinematográfico que muestra mi tránsito de la guerra a la paz a través de una de mis grandes pasiones: La fotografía”, comentó Lobo, en su cuenta de Twitter, en la que se refirió a este documental. Uno en el que se cuenta la historia de cómo una enfermera, y a su vez radioperadora, pasó a ser una de las mujeres más poderosas de este grupo.
En este producto, Lobo –quien es desplazada de la violencia– busca, según contó el director, William Ospina Ramírez, mostrarle a la sociedad una narrativa distinta, en este caso basada en las postales que captó la mujer durante los 35 años en los que estuvo internada en la selva con el fusil al hombro.
“Hoy después de la guerra, estoy finalizando mi travesía por los bosques y selvas de Colombia y no encontré mariposas de alas transparentes... se quedaron atrás, allá en la selva, donde el conflicto nos golpeó fuertemente”, se le escucha a Lobo.
Críticas al documental
El periodista Melquisedec Torres fue uno de los que se expresó en contra de este trabajo audiovisual, en el que se hace un resumen de la vida de Lobo: nacida en el municipio de La Paz (Santander) y quien, como el nombre del documental, registró la naturaleza de la zona por la que estuvo; según ella, la motivación para seguir adelante.
“Nuestros impuestos dedicados ahora a lavarle la cara a una ‘jefa’ de un grupo que sembró dolor, terror y sangre en el país. Lavarle la cara como ella le lavaba los pies a su Tirofijo. Y no reparó a sus miles de víctimas ni contó nada. Y ni un minuto de cárcel”, comentó.
Por su parte, Lorena Murcia, activista política y quien hizo parte de la Corporación Rosa Blanca, que tenía como propósito la defensa de las mujeres víctimas de violencia sexual por parte de miembros de las Farc, y quien ha señalado a Lobo como presunta encubridora de estos delitos, también se pronunció.
“Qué asquerosidad ver este tipo de cosas en mi país, es lamentable y a la vez desmotivante. Nunca habrá justicia ni verdad en mi país”, manifestó Murcia, quien ha cuestionado los acuerdos de paz del Gobierno con esta agrupación armada, firmados en octubre de 2016 por el entonces presidente Juan Manuel Santos.
Pero, así como algunos pidieron boicotear a Señal Colombia y a RTVC, también se destacaron comentarios de algunos usuarios, quienes salieron en defensa de este documental. “Lo lamento, pero yo sí veo bien que el estado haga documentales con los horrores de la guerra, mostrando un camino diferente a la violencia, que existe arte, que la sangre y la muerte jamás será el camino”, comentó un tuitero, identificado como Sebastián Andrade.